Badajoz, 14 ene (EFE).- La suerte fue esquiva finalmente para el Badajoz en el sorteo de los dieciseisavos de la Copa del Rey, ya que no le ha tocado ningún "grande", aunque al menos se enfrentará al Eibar, un Primera, al que los jugadores del conjunto extremeño confían en eliminar para seguir soñando.,El sorteo generó gran expectación en la no muy grande sala de proyecciones de las oficinas del club, donde se agolparon un gran número de medios para captar la reacción de los jugadores tras conoc
Badajoz, 14 ene .- La suerte fue esquiva finalmente para el Badajoz en el sorteo de los dieciseisavos de la Copa del Rey, ya que no le ha tocado ningún "grande", aunque al menos se enfrentará al Eibar, un Primera, al que los jugadores del conjunto extremeño confían en eliminar para seguir soñando.
El sorteo generó gran expectación en la no muy grande sala de proyecciones de las oficinas del club, donde se agolparon un gran número de medios para captar la reacción de los jugadores tras conocer a su rival.
La reacción fue de decepción primero al no poder enfrentarse a los cuatro equipos Champions y después al conocer el rival.
Barcelona, Valencia, Atlético de Madrid y Real Madrid, los equipos del primer bombo, fueron esquivos al Badajoz.
"Aún puede tocar el Sevilla, el Betis o el Athletic", afirmaba algún que otro jugador, pero antes de que estos clubes aparecieran salió el rival del equipo blanquinegro, el Eibar.
Es evidente que el conjunto armero no era el rival deseado por el equipo pacense, que ahora se agarra a las dificultades que le puso el Cacereño en la anterior eliminatoria para soñar con pasar de eliminatoria.
Solo uno de los jugadores de la plantilla deseaba enfrentarse al Eibar si no podían ser los cuatro grandes, Kike Pina, cedido por el conjunto vasco y con ganas de "demostrar" que posee la valía suficiente para estar en el equipo dirigido por José Luis Mendilibar, como ha explicado a los medios tras conocerse el rival.
Pina ha mostrado su alegría por enfrentarse al club al que pertenece, aunque ha advertido que el Badajoz "irá a por el partido".
En la misma línea se ha mostrado el extremo Guzmán Casaseca, quien ha explicado que el equipo extremeño "se lo pondrá muy difícil" al conjunto guipuzcoano, y espera que la afición también lo dé todo en este empeño.
Casaseca ha afirmado que los aficionados "ya respondieron" en la anterior eliminatoria contra Las Palmas, y en este sentido "el club no puede tener ninguna queja".
El defensa César Morgado ha manifestado que "lo importante ahora es que se repita el ambiente vivido el día contra Las Palmas" para que el conjunto blanquinegro pueda seguir soñando en esta competición.
Para ello deberá superar al siempre sólido conjunto armero, que en la liga busca alejarse de los puestos de descenso.
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