La arriesgada estrategia de Guardiola con Haaland: el delantero le da todo y el míster no deja de presionarle
Erling Haaland es uno de los delanteros más temidos del mundo del fútbol. El Leipzig ha sido el último en comprobarlo que le metió cinco goles en apenas 60 minutos. En total lleva 39 en la temporada, pero a pesar de ello para Pep Guardiola no es suficiente.
Aunque en muchas ruedas de prensa se ha dedicado a alabar el gran jugador que tiene en sus filas, sorprende que en otras también haya aprovechado para darle algún que otro ‘palo’. Para su entrenador no solo le vale que marque goles y dé alguna que otra asistencia. Quiere que participe más en el juego del equipo.
Las exigencias de Guardiola a Haaland
La primera vez que Guardiola dijo públicamente que no le gustaban ciertos aspectos de Haaland fue el 2 de octubre de 2022 tras ganar al Manchester United de goleada (6-3). El entrenador del City comenzó diciendo lo bueno que era, pero confesó que tenía que mejorar.
“Lo que más me ha gustado de Haaland hoy ha sido en el tramo final, cuando ha participado más. Él dice que prefiere tocar la pelota cinco veces y marcar cinco goles, pero a mí no me gusta eso. Quiero que toque más y que participe más. Es futbolista porque marca goles, pero tiene que disfrutar de entrar más en contacto con la pelota. Me gusta que participe más ahí”, dijo Guardiola en sala de prensa.
La siguiente vez se produjo semanas más tardes justo antes del Mundial de Qatar. Esta vez no tenía nada que ver con aspectos del juego más bien era una petición pública para que no se relajara en las vacaciones.
“Haaland estará en Marbella, seguro, y en Noruega. Lo bien que esté Haaland en la segunda mitad de la temporada depende de cómo se comporte en Marbella", dijo Pep.
Una estrategia que pocos entienden
En las siguientes ocasiones, que han sido varias, han sido por el mismo motivo. Contento con que marque tantos goles, pero siempre pide algo más. Una estrategia de Guardiola que desconcierta ya que es el jugador más determinante que tiene en el área, aunque él esté empeñado en que juega también fuera de ella.
A todas esas declaraciones se le suma el último gesto en el partido de los octavos de Champions. Haaland llevaba cinco goles y estaba a solo uno de batir el récord de la competición en un mismo encuentro, pero inexplicablemente su entrenador le quita en el minuto 63 privándole de la posibilidad de lograr.