El 'caso Negreira' es un escándalo histórico, no sólo en el fútbol español, sino también a nivel mundial. Durante las últimas semanas, el problema en el que se ha visto envuelto el FC Barcelona ante las acusaciones que se han hecho al club crece cada día con un nuevo acontecimiento. Aunque no hay ninguna sentencia o conclusión que se pueda sacar en la actualidad, es necesario dejar claro los puntos más importantes sobre el caso y la investigación que se ha ido desarrollando para sacar a la luz lo que pasó.
Todo comenzó el pasado mes de febrero cuando se había desvelado que La Fiscalía había abierto una investigación al Barcelona y a José María Enríquez Negreira, vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros de 1994 a 2018.
Una de las grandes sospechas que levantó el desconcierto fueron unos pagos realizados por parte del club culé para asesoramiento arbitral entre 2016 y 2018 para asegurarse de que los árbitros fuesen neutrales o no fueran en contra suya. En concreto, es dinero fue destinado a una empresa llamada DASNIL 95 SL, la sociedad que empleaba Enríquez Negreira para hacer las facturas al Barcelona. En total, la suma de los tres pagos ascendían hasta los 1,4 millones de euros.
El País desveló que Hacienda está investigando todo lo ocurrido entre 2014 y 2018 ya que lo anterior ha prescrito pero la cifra que se maneja en el caso es de 2,9 millones de euros. Una vez Negreira dejó de ser vicepresidente del Comité de Árbitros en 2018, el Barça dejó de contratar sus servicios, desencadenando que un año más tarde enviase un burofax amenazando a Laporta con desmantelarlo todo.
Aunque La Fiscalía no ha descubierto más pagos a partir de 2018, la investigación derivó en que sí se habían hecho más facturas años atrás. Es decir, la Agencia Tributaria sospecha que esos pagos se llevan realizando desde principios de siglo, entre 2002 y 2003 y a dos empresas más aparte de la ya mencionada anteriormente: NILSAD SCP y SOCCERCAM SL. De esta forma, la cifra que se estima es de más de 7,5 millones de euros del Barça a Negreira.
Las únicas declaraciones de Negreria en el caso se remontan a octubre de 2021. Sin embargo, el pasado mes de febrero no respondió ninguna pregunta para la investigación ya que declaró que padece Alzheimer, una enfermedad neurodegenerativa que afecta a la memoria del paciente. Su hijo también es una persona implicada ya que tenía un trato muy cercano con los árbitros por aquel entonces. En concreto, la polémica en torno a él fue que Laporta le pagó en su primera etapa como presidente en coaching.
Una vez descubierto más datos e informes sobre el caso, varios organismos se pusieron en marcha para buscar la verdad: los clubes de LaLiga (el Real Madrid se unió el último semanas más tarde), el CSD (Consejo Superior de Deporte), LaLiga con Javier Tebas a la cabeza y la UEFA. En otras palabras, una espiral de amenazas que convierten todo en un caso difícil para sacar conclusiones definitivas.
Desde informes sospechosos de una supuesta manipulación en el arbitraje hasta regalos de Negreira a los colegiados han sido capítulos que avivan más el fuego del caso. El sumario de la jueza es lo último que se ha destapado y no se ve sencillo la resolución.