Un hecho ocurrido en el Mutua Madrid Open abre el debate sobre la venta de alcohol en los eventos deportivos. Durante la final entre Carlos Alcaraz y Jan-Lennard Struff, tres miembros de seguridad echaron a un aficionado alemán de la grada al no comportarse adecuadamente. Se dedicó a echar cerveza con su mano al público al estar borracho, según nos cuenta un miembro del staff.
Un comportamiento afectado por las cervezas que se había tomado antes de entrar al estadio. Y es que este torneo si permite la venta de alcohol, no como otras competiciones como el fútbol o el baloncesto en España.
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Un altercado paralizó al Manolo Santana. Justo en una de las gradas y durante uno de los descansos del partido, varios miembros de seguridad se acercaron a un aficionado. Un alemán se había dedicado a echar cerveza al público durante la final entre Alcaraz y Struff. Un comportamiento que no toleró la seguridad del estadio. Incluso necesitó la fuerza uno de ellos para poder echar a este aficionado que seguía con el vaso de cerveza en la mano.
Durante las dos semanas de competición, el Mutua Madrid Open vendió litros y litros de cerveza, sin contar con las botellas de alcohol. Es más, cada hora tenían que reponen los barriles de 50 litros que se gastaban. Además, de los grifos de 25 litros en los puestos. Incluso la seguridad ha tenido que echar a gente borracha a las 12 de la mañana, según ha podido saber ElDesmarque. En plena luz del día, con los partidos para disfrutar y con niños correteando por las instalaciones.