El discurso ejemplar pidiendo respeto por los árbitros en el fútbol base: "El mejor gol es el que le dedicamos a quien cree en nosotros”

El mundo del fútbol está viviendo un ambiente de crispación muy alto últimamente. Ya no solo en el fútbol profesional, sino que es un problema que también está afectando al fútbol base. Por eso cada vez son más importantes las propuestas como la de Jorge Ortega, entrenador de fútbol base del CD Toledo, que antes de un partido primordial para el campeonato, decidió dar esta charla a sus jugadores, con los familiares en el vestuario, para concienciar en el respeto y la deportividad que tienen que mostrar por el rival y por los árbitros. Puedes verlo en el vídeo superior.

Una arenga ejemplar en el fútbol base

Aunque no nos demos cuenta, las actitudes de los adultos son un ejemplo a seguir por los niños. Por eso es primordial que concienciemos a los jóvenes deportistas en los valores que siempre han rodeado al deporte. Y el fútbol no puede ser menos. Llevamos meses de crispación, sobre todo con el tema de los árbitros y las polémicas que los han rodeado. Pero esto es algo que tenemos que borrar, sobre todo, del fútbol base. Los futuros futbolistas de nuestro país no tienen que crecer en ambientes hostiles hacia sus rivales o el árbitro. Tienen que crecer siguiendo el ejemplo de la deportividad y del respeto con el que siempre se ha hecho gala en el deporte rey.

Un ejemplo que siguen dando, por suerte, algunos de los entrenadores encargados de formar a las futuras estrellas de nuestro país. Es el caso de Jorge Ortega, entrenador del CD Toledo, que decidió darles esta charla ejemplar a sus jugadores para concienciar sobre el respeto al rival y al árbitro. “Presión, no. Ansiedad, tampoco. Tenemos respeto al rival, al árbitro y a nosotros mismos. Somos solidarios. Nos alegramos por el que marque, nos alegramos por el que se queda y, sobre todo, si marcamos un gol, y pase lo que pase, termina el partido, aplaudimos a papá y a mamá y les dedicamos un gol. El mejor gol es el le dedicamos a quien cree en nosotros. Y nosotros creemos en todo. ¡Vamos chavales!”