Marcelo sigue brillando en el mundo del fútbol. A sus 35 años de edad, al brasileño le queda mucho fútbol en sus botas. Y lo ha vuelto a demostrar en el Mundial de Clubes, en dónde el Fluminense ha logrado el pase a la final después de vencer 2-0 al Al-Ahly.
Un partido en el que volvió a destacar Marcelo. El ex lateral del Real Madrid viene de vencer en la Copa Libertadores y quiere sumar un nuevo título. En principio, su rival en la final será el Manchester City de Pep Guardiola, pero habrá que esperar a su partido de semifinales ante el Urawa Reds.
Sí estará en la final el equipo de Marcelo. El brasileño logró el penalti del primer gol del partido después de una espectacular jugada por banda. El lateral recibió la pelota en la banda y después de encarar a su rival, le regaló un precioso caño en dos toques que provocó el penalti. Jhon Arias no falló desde el punto fatídico y John Kenedy colocó el segundo.
Asegura el dicho que lo que funciona no hay que tocarlo, algo que debió pensar el entrenador del Fluminense, Fernando Diniz, que no dudó en apostar de inicio por el mismo once que el pasado mes de noviembre hizo historia al conquistar la primera Copa Libertadores para el conjunto brasileño tras vencer por 2-1 al Boca Juniors en el Maracaná.
Poco le importaron al preparador 'tricolor' los 43 años del portero Fabio o los 35 de Marcelo, ni mucho menos los 40 años del central Felipe Melo, que se convirtió en el jugador de campo más veterano en disputar un partido del Mundial de Clubes.
Pese a la veteranía de muchos de sus componentes, el Fluminense afrontó la cita con la ilusión de un juvenil, el mismo entusiasmo que destila el alegre estilo de juego propuesto por los de Diniz con continuas permutas de todos los integrantes del frente de ataque.