Ángel Di María se encuentra concentrado con la selección argentina. El actual jugador del Benfica fue titular en el partido ante El Salvador el pasado 23 de marzo, en el que dio una asistencia en el primer gol de Cristian Romero y todo apunta a que gozará de minutos en su próximo encuentro, frente a Costa Rica.
Sin embargo, el futbolista ha sufrido una brutal amenaza de muerte, después de que el exjugador del Real Madrid, Manchester United o Juventus, haya confesado que le gustaría acabar su carrera en Rosario Central, el club con el que debutó en 2005.
La Policía de Santa Fe y la Justicia provincial investigan una intimidación frente a la urbanización privada Funes Hills Miraflores, lugar donde suele alojarse Ángel Di María. Esta amenaza hace alusión al gobernador provincial Maximiliano Pullaro.
"Dile a tu hijo Ángel que a Rosario no vuelva más porque sino le cagamos matando un familiar. Ni Pullaro te va a salvar. Nosotros no tiramos papelitos. Plomo y muertos tiramos", contenía el cartel que dejaron al padre de di María, según informa Infobae.
El cartel fue arrojado por un turismo gris frente a la urbanización, situada en la zona vecina a Rosario. El hecho fue reportado a las 2:30 de la mañana a las autoridades por personal de seguridad del lugar, que aseguró haber visto al coche circular de forma llamativa frente al lugar. El personal de una comisaría cercana analizó las filmaciones. Allí, se encontró el cartel, que fue incautado.
El ministro de Defensa, Luis Petri, afirmó que "hay un compromiso inclaudicable de luchar contra el narcotráfico". Además, van a poner en marcha un operativo en el que fueron desplegados efectivos y medios de las Fuerzas Armadas en Rosario.
El técnico de la selección albiceleste ha hablado en rueda de prensa sobre el partido ante Costa Rica y la situación con Di María. "Va a ser titular. Está tranquilo, lo vi bien y tiene todo nuestro apoyo, estuvimos charlando un poco de todo con él", explicó.
El Club Atlético Rosario Central también emitió un comunicado rechazando las amenazas sufridas por el futbolista. "Nos sentimos agraviados, dañados y perjudicados porque este tipo de acciones violentas atentan directamente contra la economía y éxito deportivo de los clubes. No se puede permitir que quieran amedrentar a los futbolistas o atentar contra ellos y/o sus familiares que son los protagonistas principales de los espectáculos deportivos, así como tampoco se puede permitir la violencia contra ningún actor de la familia del fútbol".