El escaso margen entre los dos compromisos es algo casi insólito en el fútbol. La FIFA, organizadora de eventos internacionales que se diputan en unas pocas semanas, tiene una normativa que prohíbe expresamente jugar dos partidos en menos de 48 horas. No es un capricho. Lós médicos advierten de que el riesgo de lesión se multiplica de forma incontrolada en los dos días posteriores a un encuentro del máximo nivel, porque es el tiempo mínimo que necesita el músculo para recuperarse del esfuerzo. Los expertos recomiendan, incluso, que el descanso entre dos choques sea de 72 horas. Pero, como se ha podido comprobar, la salud no es el criterio que prevalece en el fútbol.
El carácter competitivo y ambicioso de Bielsa, en cualquier caso, invita a pensar en que tratará de que estén sobre el campo todos aquellos habituales que, aparentemente, no corran un riesgo al participar. Cabe esperar un once con una mezcla de titulares y de suplentes que cubran el hueco de los más castigados.
El Barcelona, por su parte, se verá beneficiado por esta circunstancia ante uno de los equipos que más problemas le han planteado esta temporada. Los blaugrana tratan de apurar sus opciones de título en la Liga, y lo que menos necesitan ahora es un tropiezo ante los leones. El equipo rojiblanco, por su parte, es consciente de que si pierde este partido sus opciones de alcanzar el sueño de la Champions en Liga se reducirán a su mínima expresión. Pero lo primero es lo primero. Y para un equipo la prioridad debe ser la salud de sus integrantes.
Alineaciones probables:
Barcelona: Valdés; Alves, Mascherano, Piqué, Puyol; Busquets, Xavi, Thiago; Alexis, Messi e Iniesta.
Athletic: Iraizoz; Iraola, San José, Amorebieta, Aurtenetxe; Iturraspe, Iñigo Pérez, De Marcos; Susaeta, Llorente y Muniain