en cada situación que tenemos, a veces desde el campo y otras desde fuera".
En los primeros minutos midió mal en una salida, el mismo error que parece haberle costado el puesto al de Castro. Con la diferencia de que en este caso no costó un gol. "La primera acción era fuera de juego, el delantero tenía ventaja", apunta el navarro sobre esa acción. La jugada, en cualquier caso, no condicionó su actuación posterior, que fue a mejor. "Poniendo toda la carne en el asador es cuando las cosas salen adelante", subraya.
Iraizoz confía en este método para seguir en el equipo. "Tengo un camino bastante largo recorrido y no creo que tenga que cambiar mi forma de ser ni de trabajar, porque siempre intento ayudar a mis compañeros y estar al máximo para ayudar al equipo", sostiene, antes de añadir que "las lesiones vienen y van, te merman, pero eso no se puede controlar, a veces toca sufrirlo".
En cuanto a los tres goles encajados ante el Espanyol, comenta que "a veces el balón acaba entrando por insistencia del rival (Sergio García), otras veces el contrario hace grandes goles (Víctor Sánchez), hemos recibido tres y eso es algo difícil de remontar". "La mayor intensidad del Espanyol en el inicio de la segunda mitad ha decantado el partido", concluye.