ha empezado a correr y a tocar balón. "Estoy muy contento, el esfuerzo está mereciendo la pena", celebra el excanterano del Athletic.
El prometedor centrocampista vasco sufrió una grave lesión de tobillo el pasado curso, nada más debutar en Primera con el equipo verdiblanco. Se pasó el año casi en blanco. Sus ilusiones estaban enfocadas hacia esta nueva temporada, pero el pasado mes de julio sufrió una recaída que le llevó al quirófano. La buena noticia es que la recuperación avanza por buen camino.
El lunes por fin tomaba contacto con la pelota y corría por el exterior de las instalaciones. Un gran paso tras el cual ha expresado, en declaraciones a la web del club sevillano, que "la recuperación tiene muy buena pinta. Estoy deseando volver a entrenar con mis compañeros, aunque todavía me quedan algunas semanas de duro trabajo con el readaptador Fran Molano para alcanzar un buen nivel de forma. No siento ningún tipo de molestia ni de dolor en el tobillo".