El gran lastre del conjunto bilbaíno el pasado curso fue, precisamente, la facilidad con la que los rivales perforaban su portería, mientras que los delanteros rojiblancos tenían que hacer un gran esfuerzo por tener premio en la contraria. Los de Bielsa acabaron el campeonato con la friolera de 65 dianas en contra, el tercer peor registro de los veinte equipos que conformaron la pasada Liga. Solo Mallorca (72) y Depor (70), ambos descendidos, recibieron más. Mientras, el colista Zaragoza terminó con 62.
Con poco más de un tercio de temporada consumido, Txingurri puede presumir de haber corregido esta negativa tendencia. Los leones han encajado 19 goles en quince partidos, lo que deja un promedio ligeramente superior a uno por encuentro. Solo Barça (9), Atlético (9), Villarreal (14) y Real Madrid (17) ostentan mejores números en este importante apartado. Los de Valverde crecen, por tanto, sobre unos cimientos bien reforzados por su entrenador.
En el plano realizador (23), el equipo bilbaíno es el séptimo mejor de Primera; lo cual refleja un equilibrio que permite ser optimistas de cara a la lucha por volver a Europa.