Armando: "Iraizoz está ahora disfrutando, está más enchufado"

“Iraizoz está ahora a un gran nivel, cuanto te vas haciendo mayor, maduras y está más cómodo en la portería. Ahora Gorka valora cosas que antes quizás no le daba importancia. Le veo que está disfrutando, está más enchufado”, relata el que fue compañero y ahora técnico de porteros de Lezama, Armando Ribeiro.

Armando dirige a los porteros del Basconia (Remiro y Jon Ander Felipe) y a juveniles como Areitio, Etxebarria o Unai Simón, a los que globaliza afirmando que “hay buena madera por abajo”, aunque sin deslizar  nombres. “Son chavales que prometen, y es una gran responsabilidad, pero a la vez muy bonito poder formarlos”, añade. Le parece, paralelamente, “una buena política”, la de que se vayan fogueando por medio de cesiones arqueros ya en la parrilla de salida como Raúl, o Herrerín anteriormente. 
Armando es partidario de “la alternancia, todos los porteros tiene que jugar”, como ocurrió con Herrerín en Copa en Balaídos. Un método que sí repiten en el Juvenil en categorías inferiores: “Así están más alerta y más motivados los dos. Todo lo hace la confianza”. Sostiene que Herrerín “se tiene que ganar el estar ahí, hasta que sume diez partidos seguidos es difícil juzgarle. Tiene madera y está alternando grandes partidos con otros no tan buenos”, comentó en la tertulia de Radio 7. 
La figura del entrenador de porteros que él encarna con pasión va tomando cuerpo y relevancia en los staff técnicos. Es un verdadero especialista: “Cambia la mentalidad, cambia la metodología, la figura del entrenador de porteros es ahora importante en cada club y en Lezama mucho más. Ahora está Iraizoz, pero cuando no esté tenemos que ir sobreviviendo con los porteros que vengan de atrás”, desliza. Armando es un ejemplo: “Notas el respeto, cómo te miran y cómo te escuchan”. 
El hecho de que tras diez cursos en el Cádiz fichara por el Athletic y fuera titular, desvela, provocó que “todavía se me valorara más allí, que fue lo mejor que hice en mi vida, fichar por el Cádiz. Fui muy feliz”. Armando, recuerda, “tenía todavía energía y mucho fútbol dentro”. 
Ahora se sumerge estas Navidades en pilotar la séptima edición de su Campus de porteros, donde han pasado ya “más de 200”, en sesiones de una media de 40 porteros. “Ves la demanda, que los padres están contentos y que hagan un esfuerzo”. Una vocación que se puede perpetuar en Sopelana, en las instalaciones del Ugeraga, entre los días 23 y 27. En la página www.campusarmando.com se puede pinchar para obtener más información.