De siete partidos en Primera con el Athletic, Herrerín ha disputado tres de ellos contra el Celta: "Sí, les voy a coger cariño al final, mi padre es de Vigo y hasta que yo entré en el Athletic, era del Celta". Al arquero, repestcado del Numancia, se le hace larga la espera en el banquillo: "Han tenido que pasar bastantes partidos, pero sumo mis minutos, da igual el equipo que sea y hay que aprovecharlos, como creo que lo estoy haciendo". No obstante, reconoce que "hoy por hoy, Gorka (Iraizoz) está a un gran nivel y a mí me toca esperar".
Sumergiéndose en la eliminatoria de Copa, sostiene que "sabíamos que tendríamos ocasiones, con el temor que que nos hicieran algún gol porque tienen gente técnica y rápida arriba, pero se nos ha puesto de cara con el 2-0 casi en el 45". La expulsión de Hugo Mallo fue la puntilla: "Ellos se han venido a abajo, y el 3-0 nos ha relajado porque te podían haber cogido antes una contra".