Valverde asume la necesidad de marcar en el Villamarín

Ernesto Valverde, entrenador del Athletic, espera no repetir en el Benito Villamarín los errores del partido de ida disputado en la anterior eliminatoria de Copa ante el Celta. "Nuestro objetivo es obtener el mejor resultado posible, y con goles", afirma.
 

El preparador rojiblanco subraya que "volvemos a jugar el primer partido fuera y nuestro objetivo es marcar, porque sino el margen en la vuelta es limitado y cualquier error te puede condenar". 
El Betis, como el Celta en la ronda anterior, llega al cruce del torneo del KO muy apurado en la clasificación liguera. Pero el de Viandar de la Vera no se fía lo más mínimo. "Nadie regala los partidos. A los dos equipos nos interesa la Liga, todos tenemos un partido muy importante el fin de semana, pero al mismo tiempo queremos hacer un buen papel en la Copa, ya se vio que el Celta sacó un equipo de garantías tanto en la ida como en la vuelta", recuerda.
 
En el caso concreto de los sevillanos, han cambiado de entrenador recientemente. Aún es pronto para apreciar las consecuencias. "Solo han pasado tres jornadas. Es un equipo que se ha metido en una dinámica muy negativa desde el inicio, la falta de confianza hace que cada día te cueste más y están luchando por sacar dos o tres resultados positivos que les den un poco de aire", analiza. 
El relevo en el banquillo, por cierto, propiciará su reencuentro con Juan Carlos Garrido, el técnico que le sustituyó cuando Valverde fue cesado en el Villarreal. "Es el entrenador del Betis, yo el del Athletic y ya está, no hay ningún problema", despeja.
En aquel momento se rumoreaba que el entonces técnico del filial amarillo puso de su parte para precipitar la destitución y hacerse con las riendas del primer equipo. Txingurri ha pasado página. Niega que existieran rencillas entre ellos. Ni siquiera tiene afán de revancha. "No, me gustaría pasar la eliminatoria porque supondría llegar a cuartos con el Athletic".