"Fue un encuentro muy limpio, sin muchas faltas. Ese fue un lance puntual, el árbitro es el encargado de tomar esas decisiones y el decidió eso", recuerda el de Abadiño, protagonista en la jugada al chocar la cabeza con Cristiano Ronaldo, que además le lanzó la mano.
En cuanto a lo que está sucediendo en los despachos, comenta que "no son decisiones en las que nosotros pintemos nada, son de otras partes y poco puedo decir sobre eso". Pero, de cara al futuro, ¿los árbitros se lo pensarán más a la hora de expulsar a un jugador del Real Madrid por las consecuencias? "No creo, ellos pitan lo que ven, es su obligación y tienen que estar por encima de eso", resuelve.
Y abunda en esta idea: "El árbitro es un profesional, va a pitar y redactar lo que vea y estime oportuno, no va a haber problema, seguirán haciendo lo mismo. Lo contrario me parecería una falta de profesionalidad, y en ese aspecto creo en los árbitros".
Para acabar con el asunto, se ha referido a los críticas vertidas en los medios hacia él y hacia Gurpegi, los dos que intervinieron en las salidas de tono de Cristiano que le costaron la roja. "Es parte del fútbol, y todo lo que sean críticas de ese tipo me dan absolutamente igual. Las que hacen más daño son a Gurpe, que van por otro lado los tiros, eso es triste y hay que analizarlo", protesta.