"Cuando el rendimiento de los jugadores no está al límite, podemos perder contra cualquier equipo", lamentaba Pizzi, consciente de que "debemos exigirnos más para conseguir lo que pretendemos". "A veces el partido te exige un nivel de concentración y de exigencia que internamente no encuentras", agrega sobre la derrota ante un Rayo que se aferra a la categoría.
Los valencianos se quedan con 35 puntos, quince menos que el Athletic. Además, les adelanta en la tabla el Levante de Caparrós. Ya no solo se les complica la Champions, que prácticamente les exige un pleno de puntos de aquí al final y el desplome del Athletic y el resto de rivales que tienen por delante, sino que se les está complicando lograr una plaza de Europa League. "El partido ante el Athletic es esencial para nosotros", remarca Bernat.
Los rojiblancos, por su parte, llegarán a la cita reforzados por su goleada sobre el Almería en San Mamés (4-0). El empate del Villarreal ante el Betis y la derrota de la Real en Anoeta han engordado su colchón de Champions hasta aventajar en seis y siete puntos, respectivamente, a sus dos perseguidores más cercanos. Mientras, el Sevilla se queda a doce, el Levante a catorce y el Valencia, a quince.