Lo cierto es que Valverde, un técnico meticuloso y que busca la justicia, ha dado con su espina dorsal, aunque en ocasiones la apuntala con un retoque en alguna línea, dependiendo de las características del rival de turno, como pasó en Mestalla este domingo. De este once, De Marcos sacó de rueda a Iraola para sujetar la velocidad ché por banda diestra. Dicho esto, su idea gira en torno a Iraizoz; Iraola, Gurpegi, Laporte, Balenziaga; Iturraspe, Rico, Herrera; Susaeta, Aduriz y Muniain. Un equipo recitado de memoria, como antaño, aunque, curiosamente, sólo formado esta única vez ante la escuadra de Alcaraz.
No obstante, otros jugadores de la plantilla han adquirido también su cota de protagonismo, por lo que ha variado su alineación el resto de los partidos de Liga. San José, su tercer central, suma 11 titularidades, Beñat, que arrancó contando, otras 11, De Marcos, el multiusos, 12, Ibai Gómez, que suplió a Muniain, 6, Kike Sola, 2, aunque lastrado por las lesiones, Toquero, 4, y Herrerín, 5, cuando Valverde pegó un toque de atención de Iraizoz.
De manera más residual, han saboreado las mieles de salir de saque, el joven Guillermo dos veces, Ekiza una, la del arranque liguero en Zorrilla, Saborit, dos, y Morán, una. El técnico rojiblanco es amigo de sorprender con alguna variante, para mantenar alerta a su tropa, aunque su esqueleto varíe muy poco, sobre todo en el centro de la zaga y su triángulo en la medular. El fondo de armario hace el resto.