A falta de sólo cuatro jornadas, los dos clubes vizcaínos opositan claramente al playoff de ascenso, integrados en un grupete de seis equipos que cierra el Huesca, con 56 puntos. Dos se quedarán fuera. Barakaldo, al que se le esfumaron dos puntos sobre la bocina en Zubieta, se rezaga al octavo puesto, con 52 puntos, mientras que el meritorio Amorebieta es noveno, con 51, después de golear (4-0) al defenestrado Sariñena. Ambos buscan una plaza para la Copa del Rey.
El equipo de Ziganda, que sumaba seis jornadas sin hincar la rodilla antes del bofetón en el Stadium Gal, recibe el sábado a un Amorebieta que ya no se juega nada, mientras que el River hace lo propio en Las Llanas ante una Real Sociedad B con los deberes hechos y sin nada en litigio. Dos cruces que, en principio, les debe asentar aún más en la zona aristocrática de un Grupo II con acento vizcaíno. Aunque Ziganda insiste que el objetivo principal de su colectivo versa en formar futbolistas, más que la obsesión clasificatoria. El ejemplo de Unai López es un botón de muestra, aunque sigue dependiendo de sí mismo por aquello de que les resta medirse todavía al Leganés. El técnico del River, Ángel Viadero, al contrario, insiste en que anhelan copar el primer puesto: "El resto lo va a tener difícil", subraya.