"Perder duele siempre. Nos ha faltado el arreón final para aguantar", lamentó Iraizoz, que sacó varias manos de mérito en las embestidas de los atacantes blaugranas, especialemente a los pies de Pedro y Alexis.
"El partido se nos puso de cara, con ocasiones, jugamos bastante bien y el 0-1 dio fuerzas. Pero ellos han tenido tres o cuatro ocasiones, han hecho el empate y a partir de ahí se nos hizo cuesta arriba", añade Iraizoz, que avisa de la valentía del equipo de Valverde en cualquier circunstancia: "Siempre queremos ganar y más en un escenario así. El equipo se ha vaciado y ha tenido fuerza", describió el portero. El Athletic acarició la gloria: "Ha sido una pena, pero hay que pensar en el siguiente partido. Nadie nos ha regalado nada, no podemos bajar los brazos ahora", zanjó en referencia al Sevilla.