La convocatoria de huelga indefinida por parte de la AFE y de la RFEF a partir del día 16 amenaza con convulsionar aún más el ya revuelto mundo del fútbol con una posible suspensión de las dos últimas jornadas de Liga y de la final de Copa que van a disputar el día 30 el Athletic Club y el FC Barcelona.
En Lezama, por ahora, se trabaja con absoluta normalidad preparando el partido del sábado frente al Deportivo, aunque mirando inevitablemente de reojo hacia posibles acontecimientos.
"No sabemos que puede ocurrir. Ha habido un decreto que influye decisivamente en el reparto los derechos de televisión. Cuando se hace algo de este tipo todos los agentes tienen que estar de acuerdo. Ya veremos si se retrasa todo o no. Las amenzas de huelga siempre están ahi y no sabemos si es una forma de presión o realmente tienen algo de verdad. Según vayan avanzado los días lo veremos, pero tengo la impresión de que va en serio", ha señalado Ernesto Valverde.
De cara a esa final que debería disputarse en tres semanas, Valverde reconoce que partidos como la ida de la semifinal de Champions frente al Bayern de Múnich, saldada con un rotundo 3-0 tras un nuevo recital de Leo Messi, evidencian que el Barcelona "está atravesando uno de los mejores momentos de la temporada", si bien, ha matizado, "no sabemos como estarán el 30 de mayo". "La envergadura del desafío ahora parece mayor, pero lo miramos de igual manera. Es difícil, pero es nuestra oportunidad y tenemos que ir a explotarla hasta el final", ha destacado Valverde.