En el marco del Ayuntamiento de Bilbao, con el reto "increíble" de debutar en Segunda División jugando los partidos en San Mamés, José Ángel Ziganda trazó alguna de las líneas maestras a seguir: "La plantilla va a ser muy parecida a si no se hubiese subido. Va a ser una prueba de fuego para ellos", dejando caer que alguno de los cedidos este curso en la Liga Adelante apuntalarán al filial: "Es una posibilidad, evidentemente, adaptarnos a la categoría y hay otras soluciones que le podemos dar a la plantilla. Podemos darle mayor empaque y sumar, sí".
"La idea es que sigan creciendo y desarrollándose, llevarles a los límites. El año pasado va a ser muy estimulante, la categoría nos va a exigir muchísimo", espetó el técnico navarro de su joven plantel, exultante con el nuevo escenario después de orillar a Villanovense, UCAM y Cádiz. "Lo que trasnmiten los jugadores es que tienen mucho haambre, poco miedo y no se frenan". Néstor Salinas, que marcó el Carranza y Juaristi acababan contrato y por cuestiones de "logística y planificación" salen de la plantilla, aunque nunca se sabe "en el futuro", amortiguó el míster rojiblanco. El resto tiene contrato con el club de Ibaigane y están llamados a filas el día 20 de julio antes de la criba final: "Iremos decidiendo para cuadrar las posibilidades, hace mediodía que hemos ascendido", lanzó Ziganda, que reclama sosiego ante tantos acontecimientos juntos.