Urbieta ya luce para un Gernika de Segunda B

Las obras de tapizado del campo de Urbieta están prácticamente finalizadas para regocijo de la plantilla y del técnico del Gernika, Jabi Luaces, que reclamaban desde hace años al Consistorio un césped artificial de última generación para corroborar sus prestaciones en su retorno a Segunda B. Un deseo plasmado y presto para ser utilizado.

Unas obras de remodelación y acondicionamiento que se han alargado desde el arranque del verano para que se inicie la Liga con los nuevos tepes enraizados en el rectángulo de juego. Una inversión institucional de 200.000 euros para que se exprese un plantel foral compuesto por 20 jugadores ahora mismo, a la espera de retocarlo con dos o tres jugadores más que sellen un equipo bajo las mismas directrices que marca gente de la comarca, fusionada y con sentimiento de pertenencia a un club y a unos colores. Los fichajes de Luaces con los que ha apuntalado el equipo obedecen a gente contrastada en Segunda B como Endika Bordas (Amorebieta), Josu Santamaría  (Bermeo), Diego Simón y Ander Larruzea (Leioa) y Gorka Luariz (Arenas), más los jóvenes Ander Franco (Lagun Onak) y Kevin Calle (Portugalete), mientras que el armazón del equipo continúa casi inalterable, con la permanencia de los arqueros Altamira e Intxausti, los defensas Goiria, Carracedo y Berasaluze, los centrocampistas Torrealdai, Carbonel, Otiñano, Larruzea y Salutregi y los delanteros Aimar Cid, Enziondo y Etxabe.