Otro derbi más la Real le 'puso' más que el Athletic
A veces en el fútbol se juntan el hambre y las ganas de comer. Hoy la Real Sociedad, que no había jugado entre semana, aplicó a las mil maravillas su típico plus de motivación en estos choques con una alta presión que hizo sufrir a los bilbaínos. No gozaba, que diría un pelotazale, el Athletic Club y encima se encontró pronto con un gol en contra, la lesión de Iñaki Williams en el tobillo y las molestias musculares de Aduriz. Demasiados 'marrones' juntos.
Alguno recordaba que no se remontaba un derbi desde el olímpico 92... Y no se hizo tampoco en 2016. Volaron los puntos con el (0-1) de Jonathas, con lo que los vecinos, que han hecho un gran planteamiento y un partido serio, se ponen ya a dos puntos con su cuarta victoria consecutiva. Una mala tarde rojiblanca, vacía de ocasiones, pero llena de faltas y tarjetas, a resultas de la que Raúl García, causará baja en Mestalla. El novel colegiado Sánchez Martínez sacaba tarjetas como los pajes de los reyes caramelos en la cabalgata. Hoy 12 cartulinas.
Este domingo Ernesto Valverde decidía meter alguna rotación, dar un refresco a su equipo tras el rocoso choque en Marsella. Así Gurpegui, muy desafortunado, ocupaba el lugar del sancionado Etxeita, mientras que Iker Muniain era la novedad en la media punta junto a la vuelta de Markel Susaeta (por la derecha). El esperado Raúl García empezaba el derbi en el banquillo, que no era poco tras su lesión de rodilla, pero tuvo que volver sin ni siquiera calentar.
Partido de pico y pala
También en la banqueta estaba, por parte txuriurdin, Rubén Pardo. El hombre que más pases promedia por partido y que más centros pone en el área rival de la escuadra de Eusebio. Eso indicaba que su apuesta, en plena racha de victorias, iba más por la zapa que por la creación. El Athletic, en plan espejismo, le pilló al minuto, pero el gol de Aduriz, que se llevó un sospechoso dolor en el muslo, fue anulado por fuera de juego.
Con un listón alto en cuanto a tarjetas y cánticos partía un derbi disputadísimo donde nadie estaba del todo cómodo. Se peleaba cada balón y, por ejemplo, Iraizoz y Laporte no dejaban de tirar diagonales en largo. Se presionaba la salida de balón, el centro del campo y casi hasta a los txapelgorris. El derroche físico sustituía a la técnica y la intensidad al preciosismo. Y ahí la Real estaba más cómoda, más fresca.
Palos: gol y lesión de Williams
Baste decir que la mejor jugada local el primer cuarto de hora fue una contra en la que Muniain pescó dos amarillas. La 'pedrea', vamos. La falta, lanzada por Beñat, acababa en las manos de Rulli. En el otro área fueron Jonathas y Diego Reyes quienes probaron a Gorka. Bueno, probar, el brasileño hizo el 0-1 en el 17' tras comerse Gurpegui la línea, Iraizoz el remate y Laporte el disparo. Sintomático de lo mal que lo pasaban los leones, que no veían forma de llevar un mínimo de peligro al marco donostiarra.
El marcador, el (pobre) juego generaban nervios en la repleta grada, y casi pavor cuando Jonathas en el 31', en otro horror de los centrales, perdonaba un 1x1 contra Gorka. Tan solo Muniain tenía algo de clarividencia en una tarde en la que la Real había logrado atascar la maquinaria del Txingurri casi por completo. Para colmo de males Iñaki Williams se tuvo que ir con un esguince en el 36' provocando el retorno del deseado, y ovacionado, Raúl García.
Mejoría sin premio
Muchos disgustos juntos que rumiar en el descanso. Hacía falta una reacción porque los vecinos habían sido muy superiores. Habían desdibujado a un Athletic que estaba desconocido. Al menos en la reanudación pudo quitarse la careta, haciéndose dueño del balón, pero le costaba romper las líneas donostiarras. Brujuleaba Muniain, pero salvo Balenziaga y Laporte a balón parado, allí no aparecía nadie a echarle un capote.
Fue el propio 'Bart' quien en el 72' se fabricó, tras un robo, la única opción bilbaína que se le fue arriba. Valverde, casi a la desesperada metió en el campo a Viguera e Iturraspe, pero la Real ya perdía tiempo en cada jugada, con lo que el 'otro fútbol' tomó carta de presentación mientras el crono se desangraba. De hecho solo Xabi Prieto pudo ver puerta en la recta final.
Una cita con los octavos de UEFA
Cayeron los nuestros, que ven como se complica su sexta plaza justo antes de visitar, en Liga, a un Valencia que empieza a resucitar tras estar cadavérico. Pero antes la plantilla rojiblanca deberá solventar ahora la competición europea ante el OM de Michel y Alkorta, que visita San Mamés este próximo jueves, día 25, con el handicap del golazo de volea de Aritz Aduriz. Ese tanto, que dio la vuelta al mundo, les obliga a ganar en Bilbao si quieren verse en octavos de la UEFA Europa League. La baja de Beñat y, posiblemente, de Williams le añade pimienta al partido.