Situado en el número 23 de la bilbaína Alameda de Mazarredo la sede del Athletic Club es uno de los emblemas de la capital vizcaína, al igual que su estadio de San Mamés. El palacete fue construido por el arquitecto Gregorio Ibarretxe inspirándose en los palacios clasicistas del primer barroco, fusionando dicho arte con el estilo neovasco de finales del Siglo XIX.
El palacio de Ibaigane fue la residencia de la familia De la Sota, hasta que al concluir la Guerra Civil fue incautado y reconvertido en un cuartel militar por el gobierno del dictador Francisco Franco, perteneciente al gobierno militar de Bizkaia. Varias décadas después, tras reinstaurarse la democracia, el edificio y la finca adyacente fueron restituidos a sus legítimos propietarios, concretamente en 1979.
Años más tarde, en 1986, el Athletic Club, tras la venta de Andoni Zubizarreta al FC Barcelona, llegó a un acuerdo económico con los dueños del palacete, para que a partir de aquel momento pasara a ser la sede oficial del club rojiblanco, que es como lo conocemos a día de hoy.
Tras varios meses de restauraciones, el Palacio fue inaugurado como sede del Athletic Club el 22 de agosto de 1988. Desde entonces hasta la actualidad es pertenencia del Club y un emblema para toda la familia rojiblanca.