Josué Dorrio, criado en las inferiores del Athletic y en el Danok Bat, después como mediapunta del Bermeo, con tres temporadas a sus espaldas, se enroló en verano en el CD Vitoria, filial armero, y ha recibido su premio con su debut en Copa del Rey ante el Atlético: "Agradecido a los que siempre han estado ahí apoyándome, a los que se marcharon y me siguen cuidando desde allí arriba, a los que me han ayudado para llegar a cumplir este sueño, y a los que han confiado en mí y me han dado esta oportunidad", deslizaba el joven medipunta de Santutxu.
Mendilibar, que ya el curso pasado convocaba a los Barrenetxea, Etxaburu o Corral, alistaba en esta ocasión ante el conjunto colchonero, con 2-2 final y apenados del Torneo del KO definitivamente como ya se esperaba, captaba del filial vitoriano al arquero Markel Areitio, que ya debutara en Liga, y a Imanol Sarriegi, además de Josué Dorrio.
Resultó un partido esperanzador para el Dorrio, dinámico y participativo y que casi marca en el minuto 2, con 0-0 en el luminoso de Ipurua, de una volea desde fuera del área dirigida a la escuadra que Moyá, que envíaba a córner con muchos apuros. Antes, había protagonizado una vertical combinación con Ander Capa, pero el centro no encuentraba rematador.