"Fútbol es fútbol, gol es gol" decía el difunto y chirene Vujadin Boskov. Sólo así se puede entender como el partido Athletic Club - APOEL de este jueves en San Mamés ha terminado con un escaso (3-2) que bien pudo ser un cinco o un seis... Pero en fin, es la magia de este juego del que todo el mundo dice entender y pocos aciertan.
Sin duda ha sido una victoria amarga para unos leones que pudieron sentenciar la eliminatoria con creces y buen fútbol, pero que sin embargo viajarán la próxima semana a Nicosia con el intringulis de que un 1-0 les pone en la calle. Pero hay que confiar, eso nunca le ha pasado al Athletic en europa, y además es mejor equipo.