Álex Remiro sale del entrenamiento en ambulancia

Susto en la mañana del miércoles en Lezama. Durante el regreso al trabajo de la primera plantilla del Athletic Club tras la jornada de descanso de ayer ha habido un percance físico. El portero internacional sub 21 Álex Remiro, recientemente recuperado de su cesión en el Levante, no ha podido completar el entrenamiento tras recibir un fuerte balonazo en la cara por parte de Iñaki Williams en un lance fortuito de un partidillo.

Tras quedar conmocionado, aunque sin perder la consciencia en ningún momento, sobre el césped, el meta de Cascante ha abandonado el campo en camilla con la cabeza inmovilizada siendo atendido por el doctor Paco Angulo, quien le ha tratado posteriormente del golpe en el interior de la enfermería. En el párking de las instalaciones una ambulancia esperaba al navarro por si había de poner rumbo a un centro médico, a la que posteriormente se ha añadido incluso una UVI móvil, que es la que finalmente le ha trasladado junto al doctor Lekue.
La última hora, según fuentes oficiales del club rojiblanco es que el futbolista permanece estable, con un pequeño traumatismo craneoencefálico, pero lo importante es que no hay peligro para su salud. Lo normal, por protocolo, en estos casos es que permanezca una serie de horas en observación para descartar cualquier complicación posterior derivada del balonazo.