Ha comenzado con fuerza la carrera contra el reloj para conseguir la recogida de firmas de socios necesarias, en torno a 2.200, un 5% del censo total, que confirmen a los dos espadas como candidatos de hecho para optar al sillón de Ibaigane.
Luego, si se logra, llegará el debate y la confrontación democrática. Son siete años ya sin pasar por las urnas, sin asambleas extraordinarias y sin poder debatirse el modelo de club que se necesita para los difíciles retos del momento y del futuro.
La carrera hacia el sillón presidencial del Athletic Club está lanzada. Los socios están citados el 27 de diciembre en las urnas para elegir al sucesor de Josu Urrutia entre los dos, de momento, precandidatos que han decidido lanzarse a la arena electoral.
Se trata de Alberto Uribe-Echevarria, hasta hace una semanas contador de la directiva del Athletic, por un lado. Y al otro, estará Aitor Elizegi, afamado cocinero, empresario y presidente de Bilbao Dendak.
Uribe-Echevarria fue el primero en dar el paso. Ayer se dejaba ver en Lezama contemplando la goleada del Bilbao Athletic al Langreo con dobletes de Iñigo Vicente y Asier Villalibre.
El economista, prejubilado, bilbaíno de 59 años, ha sido el cerebro de las cuentas del Athletic Club durante los siete últimos cursos. Representa una candidatura continuista, con la bendición del PNV, cuya composición se conocerá "en los próximos días" y que integrará a socios ajenos a la última directiva pero "con muchos puntos en común" con su visión del club.
En ese perfil, blanqueador del continuismo en una plancha llena de 'ex' directivos de Urrutia, entrarían Mario Fernández hijo o Vázquez Eguskiza. Según informa Gara, este lunes, a las 13:00 horas, tendrá lugar la apertura oficial del local habilitado para la recogida de avales, situado en la calle Colón de Larreátegui 21.
Aitor Elizegi saltó al ruedo electoral cuando todo apuntaba a que Uribe-Echevarria sería el único candidato y, por ende, proclamado presidente sin necesidad de comicios. El cocinero y empresario bilbaíno de 52 años ha sido protagonista de un sorprendente 'donde dije digo, digo Diego'.
El viernes anunciaba su intención de presentarse a las elecciones, tan sólo 48 horas después de asegurar que no se daban las "circunstancias necesarias" para afrontar esa responsabilidad, en alusión al aval de 19 millones que debía aportar para formalizar la candidatura.
Logrado ese aval ahora necesita el otro, el de las firmas. No lo tiene fácil. De hecho, en su entorno, se piensa que la fecha ha sido puesta de forma muy calculada. Sólo deja tres días laborables, en mitad de un puente, para buscar esos refrendos. Va, como se dice en ciclismo, con el gancho.
En @baiAthleticbai anuncian diferentes locales y localidades (Bilbao, Zamudio) "para la recogida y firma de avales sociales que nos permitan oficializar nuestra candidatura".
Serán los socios quienes tengan la última palabra, pero la decisión que salga de las urnas el 27 de diciembre afectará a todos/as los/as athleticzales. Por eso, desde ElDesmarque Bizkaia queremos conocer la opinión de los lectores sobre cuál de los dos precandidatos merece convertirse en el próximo presidente del Athletic Club.