No pudo ser. El Athletic Club Femenino cayó este miércoles eliminado de la Copa de la Reina tras perder (0-2) en cuartos ante el Atlético de Madrid en una noche que pasará a la historia en San Mamés, que registró un llenó histórico (48.121 espectadores). Joseba Agirre, entrenador del Athletic Club Femenino, tenía sensaciones encontradas. Enrabietado y apenado por la dura derrota, que a su entender no hace justicia a lo visto sobre el verde, pero orgulloso de sus jugadoras y de la tremenda respuesta de la afición rojiblanca.
"Una pena. El 0-2 no hace justicia a lo que se ha visto. Es demasiado abultado. Parece que el Atlético nos ha dado un baño. Es un equipazo, líder en Liga, pero hemos tenido ocasiones como para haber estado con una pizca de ponerlas más nerviosas. Pero las jugadoras no se han dejado nada en la mochila y sólo puedo darles la enhorabuena", ha analizado un Joseba Agirre afónico y algo emocionado.
El técnico de Ortuella sentía "rabia" por el momento en el que han llegado los goles colchoneros. "Hemos encajado en el 45 y el 95 y debemos aprender de los errores y leer mejor los partido. No es la primera vez. Cuando se repite no es mala suerte, sino que debemos seguir concentradas hasta el final".
"El segundo gol es hasta entendible, pero el primero es el que más rabia me ha dado"
Agirre reconoce que, aún con una menos, el Atlético ha impuesto su ley de líder de la competición. "Con Ludmila arriba, con la velocidad que tiene, nos podía haber hecho un roto. Hemos metido más presión, más centros, pero no hemos estado muy afortunadas, pero había que arriesgar, siempre con la intención de no encajar gol y estar metidas en el partido. Hemos cambiado a la central porque tenia amarilla, hemos intentado hacer cambios, pero no ha podido ser", ha lamentado.
"El público ha respondido fenomenal al llamamiento, hemos estado súper arropadas. Es para estar orgullos de esta camiseta, de este escudo y de la gente del Athletic".
"Una pena que no les hayamos podido dar una alegría para demostrales lo agradecidos que estamos"
Ese lamento ha invadido el vestuario rojiblanco de lágrimas. "Las jugadoras estaban sensibles, emocionadas, apenadas, algunas llorando porque se sentían responsables y en deuda con la afición. Les he dicho que estuvieran tranquilas porque hoy se han vaciado. Han respondido a las expectativas y han sabido pelear hasta el 95. No se les puede decir nada", ha apostillado.
Asume Agirre, que lo visto esta noche en San Mamés no tendrá su correspondencia en Lezama, donde este domingo el Athletic recibe al Rayo en la Liga Iberdrola. "Es es la realidad. Pero vamos a disfrutar de esto, que es para no olvidar. El domingo, vuelta a la realidad. Viene el Rayo y debemos centrarnos en la Liga"