El Huesca, próximo rival del Athletic Club de Bilbao (el lunes noche), ha revivido. El cuadro oscense parecía descendido tras una horrible primera vuelta de campeonato. Ahora, tras reforzarse en el mercado de invierno, ven más cerca una salvación que hace un mes era una quimera.
En sus dos triunfos consecutivos en liga ha tenido gran incidencia el buen momento que atraviesan sus delanteros. Han mantenido a Ávila y al Cucho Hernández, pero han efectuado un cambio. Samuele Longo, que pasó sin pena ni gloria, se ha marchado y en su lugar ha llegado el pichichi de LaLiga 123, Enric Gallego.
Ávila ya le amargó la noche al Athletic marcando el tanto del empate en la igualada entre ambos conjuntos en la segunda jornada de liga. La pasada semana marcó un doblete que permitió a los suyos vencer al Girona en Montilivi.
El Cucho no termina de arrancar, pero es un atacante de nivel y que ha marcado en escenarios tan imponentes como el Camp Nou. Sin embargo, el más destacado es el ya mencionado Gallego. En su debut ante el Valladolid se estrenó como goleador con la camiseta del Huesca y frente al Girona dio una asistencia. En LaLiga 123 había marcado 15 goles en 19 encuentros jugando en un equipo de la parte baja como el Extremadura.
Estos atacantes pondrán a prueba la solidez que ha venido mostrando el Athletic de Gaizka Garitano. Los bilbaínos han demostrado que es difícil hacerles ocasiones claras y más aún anotarles. Ahora contra un rival directo deberán contener a estos delanteros para poder sacar algo positivo del Alcoraz.