Aritz Aduriz mantiene su buena racha en Baiona (1-2)

Aprovechando el parón de LaLiga Santander por los partidos de selecciones, el Athletic Club ha disputado este jueves un amistoso ante el Toulouse en el Estadio 'Didier Deschamps' de Baiona. Duelo que ha terminado con un marcador favorable de (1-2), con goles de Iseka, Aduriz e Ibai Gómez, este de penalti en la recta final.

El 'killer' donostiarra mantiene su tino. Tras el golazo ante el FC Barcelona sigue en racha y, desde luego, está claro que este año está más fresco. Si se las pones bien en el área todavía las clava. En el 65' 'Adu' fue sustituido por la gran perla de Lezama, Oihan Sancet.

El equipo ha demostrado su habitual consistencia, salvo en la jugada del gol, en busca de ese paso adelante fuera de San Mamés. Una noche en la que Iñigo Martínez fue expulsado, y en la que el técnico francés quitó un futbolista para jugar en igualdad de condiciones. Chapeau para él.

Como era menester, Gaizka Garitano ha ofrecido ritmo competitivo y una ración de minutos a los menos habituales en sus planes. Así, el once rojiblanco en Iparralde estuvo formado por Iago Herrerín; Lekue, Yeray, Vivian, Balenziaga; San José, Beñat; Larrazabal, Kodro, Ibai Gómez; y Aritz aduriz. 

Cabe destacar las ganas de Iñigo Lekue, con ansia por dejar atrás su calvario con las lesiones, que le han hecho perderse prácticamente la pretemporada. El de Deusto disputó sus últimos minutos oficiales de competición el 24 de marzo en Butarque. Hoy ha estado activo, al igual que Larrazabal, hasta que fue sustituido por Areso.

Lógicamente el conjunto vizcaíno mantuvo su hoja de ruta trazada la temporada pasada. Pese al cambio de caras la presión adelantada en la salida de balón fue marca de la casa. Un acechar al rival que llegaba hasta casi la línea de gol del portero Mauro Goicoechea.

Pero faltaban sincronismos y tensión... o sobraba empanada. A los 8 minutos el Toulose marcaba en su primera aproximación. Por medio del belga Leya Iseka, sin que Yeray ni Vivian mostraran demasiada contundencia para encimarle, ni sus compañeros para tapar la línea de pase.

Con un juego más combinativo de lo habitual el Athletic trató de aprovechar las cabalgadas de Larrazabal, su entendimiento con el renacido Lekue, y algún centro de Ibai para acercarse al marco rival. Hubo algún remate flojo de Larra y de Kodro, pero el mayor peligro nació de la manía de los franceses de sacarla al 'tiki-taka'. Se auto dieron algún pequeño susto, tampoco muy grave.

Gran gol de Aduriz

De hecho alguna contra de los 'Violetas' de Alain Casanova dio sensación de peligro. A Herrerín, por ejemplo, le tocó estirarse en un tiro ajustado a su palo izquierdo. Luego ya el partido fue ganando tensión poco a poco, e incluso se fue 'calentando' con algún pique, como el que acabó con tarjeta para Aduriz.

Pero ya había más ritmo. El Athletic se adueñó de la pelota. Mandaba. Hubo que esperar al 31' de juego para ponerle, ¡por fin!, un buen balón en la zona caliente a Aritz, que tras controlar con la derecha resolvió con un zurdazo inapelable. Un tanto, el del empate, digno de un crack. Con ese 1-1 y algún roce de más, se fue el 'amistoso' al descanso.

Expulsión del 'Kaiser'

Mikel Vesga y Unai López tomaban el mando del equipo en la reanudación, con el añadido de Iñigo Martínez (que hizo pareja con Sanjo atrás hasta que fue expulsado por protestar) y de su tocayo Córdoba. Cuatro sustituciones de Garitano que mantuvieron el control vasco. Vesga se animó a disparar con un gran tiro desde la frontal, pero Iago fue aún más eficaz, ya que le sacó un 1x1 a Wesley a bocajarro que bien pudo ser el 2-1.

Seguro que al técnico le mosquean esos agujeros que a veces dejan los suyos en la presión. Lo que no entendió ni él ni nadie es por qué echaron al central de Ondarroa por protestar en un amistoso. Pareció poca cosa, pero eso obligó a jugar con 10 un cuarto de hora largo. Vesga tuvo que bajar a hacer de central con San José.

El técnico galo tuvo un gran gesto

Ya que él mismo protestó la expulsión de Iñigo Martínez, sacó motu proprio a un jugador del Toulouse del campo, a su futbolista Boisgard, y dejó a los suyos con 10 para que el partido estuviera igualado. Sin duda un auténtico caballero del fair play.

En la recta final Unai López tuvo una buena ocasión para desnivelar el marcador, pero su tiro se fue cerca del palo. Parecía que iba a acabar en empate hasta que el colegiado decretó penalti por mano del defensor japonés Shoji en el minuto 86. Pena máxima que Ibai Gómez transformaba engañando por completo al portero Mauro Goicoechea, que se tiró al otro lado. Fue el tanto de la victoria en una noche curiosa. Lo importante es que el equipo, siempre sólido, sigue ganando.