El 24 de abril de 1999 pasará a la historia por ser el día en el que la selección de España sub 20 consiguió el primer, y hasta ahora único, Mundial de fútbol de su historia. El combinado dirigido por Iñaki Sáez conquistó en Nigeria un título irrepetible. Entre los 18 jóvenes futbolistas de aquella generación de oro que lograron ese hito, tres jugadores que vistieron la camiseta del Athletic Club: Dani Aranzubia, Pablo Orbaiz y Fran Yeste.
El combinado sub 20 alzó el trofeo tras vencer por 0-4 a Japón. La alineación de aquel partido la formaron Aranzubia; Coira, Bermudo, Marchena, Jusué; Orbaiz, Xavi, Varela (m.63, Rubén), Barkero (m.80, Aganzo), Gabri (m.71, Colsa), Pablo.
Alrededor de las siete de la tarde de aquel 24 de abril de hace 21 años, bajo la atenta mirada de Ángel María Villar y del entonces ministro de Educación y Cultura, Mariano Rajoy, el capitán Pablo Orbaiz levantó la primera copa que Joseph Blatter entregaba personalmente como presidente de la FIFA.
El camino de la selección hacia el título pasó por ganar en la fase de grupos al Brasil de Ronaldinho por 2-0, empatar a cero con Zambia y ganar por 3-1 a Honduras. En los octavos Estados Unidos lo puso difícil pero el encuentro acabó con victoria española por 3 a 2.
En los cuartos, tras empatar a uno, la selección español se impuso a Ghana en los penaltis por 8 a 7. En las semifinales ganó 3-1 a Mali donde había jugadores de la talla de Keita y Diarra, antes de vencer en la gran final, donde se mostró intratable, a Japón (0-4).
Sin embargo, no todo fue un camino de rosas. El grupo pasó momentos difíciles en Nigeria. Dani Aranzubia recordaba en una entrevista a Marca que antes el partido crucial de cuartos "tuvimos que cambiar de hotel y recuerdo que una noche tuvimos que dormir en pareja en la misma cama. A mí me tocó con Yeste".
Iñaki Sáez explicaba, al mismo medio que tuvo que ejercer de sicólogo con el grupo de jovenes jugadores porque "se querían volver a casa si no nos cambiaban el hotel, que era precario: había lagartos por las paredes, un comedor donde no cabíamos, las camas eran individuales...".
El exleón destacaba el papel trascendental que jugó Pablo Orbaiz, como capitán, en esos momentos para seguir adelante: "Me ayudó mucho para convencerles, fue fundamental".