Esto se acaba. Los hombres de Marcelino García Toral disputan este sábado, en el estadio Martínez Valero ante el Elche CF de Fran Escribá, el último partido del curso, la jornada 38 de LaLiga Santander. A su paso por Radio Euskadi Oihan Sancet analizaba lo que ha dado de sí la temporada del Athletic Club de Bilbao. Algo que le parecían palabras mayores, ya que ha sido un año muy particular con 3 finales disputadas, con alegrías como la Supercopa y grandes disgustos de calado histórico probablemente.
"No creo que una temporada entera se pueda evaluar en una nota. Ha habido momentos buenos y otros no tan buenos. No me atrevería", explica el talentoso jugador de Mendillorri. "No ha sido una temporada fácil, ha habido muchos cambios, las finales pérdidas... pero bueno,... tenemos que poner el punto final para volver con ganas a la siguiente campaña y hacerlo lo mejor posible", ha apuntado en el espacio nocturno 'Fuera de Juego'.
"Teníamos mucha ilusión en las finales de copa... tal vez esa ilusión se transformó en nerviosismo... pero la verdad es que no salieron bien las cosas", admite el navarro, que vivió desde dentro las dolorosas derrotas ante la Real Sociedad y el FC Barcelona en La Cartuja de Sevilla.
Fue sin duda un mes de abril aciago en el que las banderas zurigorris de los balcones de toda Bizkaia acabaron convirtiéndose en paños de lágrimas para la afición athleticzale. "Es una situación rara jugar dos finales. Pierdes la de la Real y en 15 días juegas otra. Se hizo difícil", zanja Sancet sobre un episodio aún sin cicatrizar.
"Hay plantilla suficiente para hacer algo importante el año que viene", avanza el futbolista de Marcelino. El técnico asturiano espera que con descanso y una buena pretemporada, ya que de posibles fichajes no habla, su vestuario dé un paso al frente. "El míster nos pide que seamos regulares. No vale con hacer dos partidos buenos y 7 malos", apunta Sancet.
El ahora segundo delantero sabe que el nivel de exigencia ha de estar alto o si no la maquinaria se atasca. Más en un plantel con escasos cambios o refuerzos en el Mercado como la bilbaína. Están los que están. "Tenemos que ser cada vez más competitivos... Tenemos que tener ese hambre. De cara al año que viene ser cada vez más grandes", solicita Oihan.
Pero eso hay que demostrarlo en el campo. Han volado demasiados puntos que se habían merecido. Es lo que tiene la Primera división, que nadie coge prisioneros. "No hay ningún equipo fácil. Todos son muy competitivos, todos son difíciles", alerta. "Cuando hemos jugador con equipos de abajo no nos han salido las cosas bien", señala en un ejercicio de autocrítica.