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De Le Tissier a la camiseta rojiblanca: los vínculos entre Athletic y Southampton

José Manuel Simón

El Athletic Club concluye su pretemporada este fin de semana con dos amistosos de altísimo nivel ante Southampton y Liverpool. Pero, más allá de la entidad de los rivales, son dos partidos con una notable carga sentimental. No obstante, y pese a que el equipo de Anfield tenga un amplísimo seguimiento en Bizkaia -hasta el punto de tener su propia peña-, son muchos los vínculos que comparten los leones con el club del sur de Inglaterra.

La primera es la más obvia, ya que la equipación rojiblanca con pantalones negros es una reminiscencia de la del Southampton. En sus primeros años de vida, el Athletic Club vestía de blanquiazul, igual que el Blackburn Rovers. Pero en un viaje a Inglaterra en 1910, al ver que no quedaban más camisetas con ese patrón, el directivo Juan Elorduy adquirió un lote de equipaciones del Southampton porque el rojo y el blanco son los colores de la bandera de Bilbao.

La otra es el trabajo y la importancia de la cantera, aunque mientras que el Athletic suele retener a sus jugadores, el Southampton tiene fama de que muchos clubes grandes pescan de su caladero. Así, jugadores como Gareth Bale, Theo Walcott o Adam Lallana son algunos de los más destacados que han salido de su fútbol formativo en los últimos años.

Lance del último Athletic-Southampton, jugado en 2016 (Foto: Athletic Club)

Matt Le Tissier, un fan del Athletic en Inglaterra

El ídolo del Southampton, Matt Le Tissier, fue el primer galardonado del trofeo 'One club men' que entrega el Athletic desde 2015. Desde entonces, la relación del jugador inglés con la del conjunto rojiblanco es máxima, hasta el punto de que se llegó a alegrar cuando el equipo por aquél entonces entrenado por Gaizka Garitano se alzó al liderato de LaLiga Santander en 2019.

De hecho, el club lanzó camisetas de merchandising con una célebre frase pronunciada por Le Tissier que Iker Muniain lució cuando se anunció su renovación en noviembre de 2018. "Jugar con los grandes clubes es un buen desafío, pero hay otro mucho más complicado: jugar contra los mejores y vencerles".

Como curiosidad, uno de los mitos de los primeros años de la historia rojiblanca, el guardameta Raimundo Lezama, empezó su carrera en el Southampton ya que se refugió allí durante la Guerra Civil.

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