"Va por ti, aita", Alazne Bárcena emociona a San Mamés

Seguro que tiene que tener en su interior una mezcla de emoción, congoja, orgullo y adrenalina. Alazne Bárcena, socia del Athletic Club, fue la persona elegida para realizar el saque de honor en el choque de LaLiga Santander ante el FC Barcelona que se ha disputado hoy sábado, día 21 de agosto, en San Mamés. Su carta en memoria de su aita, José, fallecido en noviembre pasado, la persona que le hizo amar a este Club y estos colores, puso los pelos como escarpias a todos los athleticzales. Era imposible no encoger el ánimo.

Lo hizo "en representación de la afición" rojiblanca en el que ha sido el primer partido con público en las gradas de La Catedral después de casi un año y medio. Hay que tirar la memoria hasta el 1 de marzo de 2020 para ver a los seguidores zurigorris en la grada.

Bárcena, de 27 años, había sido seleccionada por el patronato de la Fundación Athletic tras responder a la convocatoria realizada por el club a sus 43.425 socios. El objetivo era conocer sus historias particulares relacionadas con la pandemia. En el caso de Alazne es un "homenaje" a la figura de su padre, fallecido como les contamos, en estos meses previos.

Alazne no estuvo sola en el césped...

"La dificultad" de la elección y la "tarea ingrata" del descarte del resto de historias había animado al Athletic a elegir también a los protagonistas de otras dos historias. Se trata de Juan Bonilla, de 97 años, y de Ekain Begoña, de 16 meses, que acompañaron a Bárcena en este simbólico acto.

"De esta manera, sobre el césped de San Mamés están representadas diferentes generaciones, eslabones de una única cadena, la que conforma este club único desde su nacimiento en el siglo XIX", había destacado la entidad bilbaína.

La afición del Athletic volvió, en pequeñas dosis, a San Mamés

A ese Athletic-Barça acudían los 10.595 socios agraciados esta semana en el sorteo realizado entre los 15.468 inscritos para presenciar en directo el partido. Esa cifra de aficionados supone el 20 por ciento del aforo de La Catedral, el límite establecido por el Gobierno Vasco debido a la pandemia de COVID-19.