Sobre Lezama, Marcelino y el futuro de la brillante generación de Sancet

Lezama cumplió el pasado jueves 51 años de vida. La fábrica de leones y leonas abrió sus puertas un 27 de enero de 1971. Curiosamente, la efemérides de los pulmones del Athletic Club (coincidirán conmigo en que el corazón reside en la afición) ha coincidido en el tiempo con unas declaraciones de Joseba Etxeberria a tener en cuenta.

“Puede ser la mejor camada de los últimos 20 o 30 años“, lanzó el 'Gallo' de Elgoibar en la emisora Onda Vasca. Habitualmente sensato y comedido, el vaticinio de una persona que conoce bien los entresijos de la cantera sorprende por su rotundidad. Palabras mayores.

Hito en Lezama a las órdenes de Marcelino

Una camada de leones oscila entre uno y cuatro nacimientos. En algunos partos, menos frecuentes, pueden ver la luz hasta seis crías. Pues bien, la naturaleza ha firmado un hito en Lezama. El aficionado rojiblanco ha sido testigo esta temporada de siete alumbramientos: dos confirmaciones (Sancet y Vencedor) y cinco efervescentes apariciones (Agirrezabala, Vivian, Zarraga, Nico Williams y Serrano).

Todos rondan los 20 años salvo Zarraga (23), que hace de nexo de unión con la camada del 98 (Simón, Unai Nuñez y Villalibre). Hablamos en total de una decena de jugadores que son el presente y el futuro del primer equipo a corto y medio plazo. Y está por ver que pueden ofrecer Artola, Prados y Paredes, tres cachorros de 21 años que están tocando la puerta de San Mamés.

La realidad rojiblanca está cargada de esperanza

Filias y fobias al margen, no está de más recordar que esta brillante generación tomó forma en la etapa de José Mari Amorrortu, director deportivo y responsable de Lezama durante muchos años.

Agirrezabala (Antiguoko), Vivian (Santutxu), Sancet (Osasuna), Vencedor (Santutxu) y Nico Serrano (Villarreal) llegaron como incorporaciones externas mientras que Zarraga, Nico Williams y Artola, el último en debutar, han completado la escalera formativa desde alevines. Sin embargo, esa no es la cuestión. El dilema es conocer quién permitirá que esta camada cristalice y se convierta en una sólida realidad.

La cuestión Marcelino

El Athletic no tiene entrenador para el próximo curso. De hecho, tampoco presidente ni dirección deportiva, pues hay unas elecciones esperando al término de la presente temporada. Pero la camada de Sancet necesita un guía que permita dar rienda suelta a sus numerosos talentos. Javi Martín, un agudo observador de la cantera rojiblanca, reflexionada así esta semana en redes sociales: “Marcelino sabe gestionar el proceso de maduración del jugador joven en la élite”. Lo suscribo. Y los datos también lo corroboran.

Hasta 26 futbolistas han debutado en LaLiga Santander bajo las órdenes del de Careñes

Diez en el Villarreal (Nahuel, Adrián Marín, Aleix García, Pedraza, Rodri, Manu Trigueros, Gerard Moreno y Fran Sol, entre otros), seis en el Racing de Santander (Iván Bolado, Marcano y Álvaro González, por ejemplo); cuatro en el Valencia (Ferrán Torres, Kang In Lee, Nacho Vidal y Álex Blanco) y cuatro en el Real Zaragoza (Laguardia y Ander Herrera como máximos exponentes), además de Campaña (Sevilla FC). La mayoría son jugadores contrastados en Primera o Segunda división, y algunos, incluso, han sido reclamados en Inglaterra o Francia.

El técnico de Villaviciosa tiene sus detractores y sus relaciones con las directivas no siempre son fluidas, pero su trabajo le delata. Sabe sacar partido a sus equipos y logra dar poso a la cantera. Y la camada del Lince (el mote se lo atribuyo a Miguel Quintana, un soplo de aire fresco en el periodismo deportivo) no puede esperar. Solo por eso, la renovación de Marcelino debería ser motivo de consenso entre los futuros candidatos, si los hubiera, igual que ocurrió con Joaquín Caparrós en 2007.