El intento de la plantilla de Ernesto Valverde de recuperar posiciones en la liga no oculta el cosquilleo que genera entre la afición del Athletic Club la disputa de la semifinales de la Copa del rey ante el CA Osasuna, como ha explicado el central Yeray Álvarez. El 1 de marzo el estadio de El Sadar de Pamplona va a ser una caldera para apoyar a los hombres de Jagoba Arrasate y, posteriormente, el 4 de abril San Mamés va a tener una entrada que seguro rozará las 50.000 personas para tratar de apear a los Rojillos y llegar a una tercera final en las cuatro últimas ediciones. Uno de los hombres fuertes de los navarros es Jon Moncayola.
El centrocampista de Garinoain, que a veces tiene que hacer labores de lateral derecho, puesto en el que metió su primer gol con su actual equipo, sonó durante las pasadas elecciones como refuerzo para la candidatura a la presidencia de Ricardo Barkala. La menos votada de las tres que contendían por el trono de Ibaigane.
"Esta temporada estamos jugando mejor que años anteriores, tenemos una plantilla más completa, y no sé dónde está nuestro techo"
En ese sentido, el futbolista de 24 años nunca ha podido negar que no lo pasó del todo bien por el runrún continuo sobre su persona y los comentarios que se vertieron. En una entrevista concedida este martes por la noche a Radio Euskadi ha apuntado que "te vas preparando para ser futbolista y llegar a profesional, pero nadie te enseña a gestionar las situaciones difíciles. Sabemos que, a veces, los jugadores somos mercancía. Visto lo visto me habría gustado hacer las cosas de forma diferente".
"¿Mi vinculación al Athletic en la campaña electoral? Fueron meses complicados, sobre todo después de las elecciones. Fue un momento de saturación mental. Si se volviese a repetir, trataría de hacer las cosas de modo diferente", explicó el osasunista.
Jon Moncayola firmó con Osasuna hasta 2031 con una cláusula de rescisión de 20 millones de euros desde 2023 y de 8 si el club desciende
En la emisora pública vasca se refirió lógicamente a ese doble enfrentamiento ante los leones de Ernesto Valverde, que van a buscar una plaza en la final con la esperanza de estar el sábado 6 de mayo en la Cartuja de Sevilla para hacer frente a uno de los dos colosos del fútbol español, o el FC Barcelona o el Real Madrid.
"Seguramente el partido de ida de las semifinales tendrá un resultado cerrado, y la eliminatoria se decidirá en San Mamés. Iremos allí con todas las ganas del mundo. Llegar a la final de Sevilla sería un sueño", apuntaba el de Garinoain.
Es más el ambiente es casi de euforia en Iruñea. "Nos gustaría estar todos disponibles para la Copa, poder disfrutar todos juntos de esto que nos hemos ganado. Ojalá podamos ir a Sevilla... ya tenemos amigos y familiares buscando hoteles. La gente está cachonda".