El próximo sábado se disputará la final de la Copa del Rey. Athletic Club y Mallorca se verán las caras en un duelo que a más de uno le dividirá el corazón, como es el caso de Joaquín Caparrós.
El técnico sevillano, después de entrenar al Deportivo de la Coruña durante dos temporadas, se hizo cargo del banquillo del Athletic Club. Desde julio de 2007 hasta junio de 2011, Caparrós dirigió al equipo vasco en 187 partidos. Entre ellos, disputó una final de Copa del Rey.
Después de dejar Bilbao y, tras una breve experiencia en el fútbol suizo, llegó a la isla de Mallorca para asumir las riendas del equipo. Fichando en octubre de 2011, dirigió al club en 64 ocasiones, para finalmente dejar la entidad en febrero de 2013.
"Es un partido muy bonito, que hace grande al fútbol. La Copa del Rey, que es la competición más bonita, está muy abierta a todos los equipos. Es la competición del fútbol", explicó el técnico sevillano.
El RCD Mallorca buscará su segundo título copero mientras que el Athletic tratará de romper una racha que dura 40 años. "Todo Vizcaya estará pendiente porque es su competición. El Mallorca también tiene esa ilusión de conseguir el trofeo. Vamos a ver un bonito espectáculo, tanto dentro como fuera del terreno de juego", señaló.
Joaquín Caparrós no se mojó con su favorito para llevarse el trofeo. "Te voy a ser sincero. No es un tópico, pero en una final todo es posible. Hay muchísimas circunstancias en un partido", apuntó.
"La situación anímica es difícil porque los dos equipos van a estar súper motivados, por lo tanto aquel equipo que sepa manejar ese estado de exceso y de motivación tiene mucho ganado. Luego el transcurso del juego te dicen mucho: cualquier lesión, cualquier percance o un error humano. En un partido es complicado decir quién es el favorito", añadió.
No obstante, Joaquín Caparrós no es el único con el corazón dividido ante la gran final. Aritz Aduriz, exjugador tanto del Athletic como del Mallorca, tiene una difícil papeleta.
El exdelantero ha reconocido ser hincha del club vasco. No obstante, actualmente trabaja como miembro adjunto a la dirección deportiva bermellona. "Sobra decirlo, es innegable que es una situación que no es fácil porque en los dos aspectos tendré muchísima alegría y muchísima decepción", explicó durante una entrevista.