El CD Leganés - Athletic estuvo protagonizado por un intenso diluvio que comenzó una hora antes del partido que no bajó de intensidad hasta casi el descanso del encuentro. Muchos pepineros optaron por quedarse en casa y ver el partido por televisión ante el aguacero que caía en la zona sur de Madrid. No así los athleticzales desplazados, que no pararon de apoyar a su equipo.
La afición del Leganés tardó bastantes minutos en empezar a llenar las gradas de Butarque. Los aficionados del conjunto pepinero esperaron en los vomitorios del estadio y bajo los pocos edificios que ofrecían cobijo en las inmediaciones del estadio del Lega. Sin embargo, todos los aficionados del Athletic que tenían entrada para el partido, estuvieron desde el calentamiento apoyando a su equipo, sin dejar de animar ni un solo segundo pese al intenso aguacero que bañaba la ciudad del sur de Madrid.
Sin sentarse, de pie y aguantando de manera estoica la lluvia. Un compromiso total por el equipo, un amor por los colores que no pasó desapercibido para los aficionados del Leganés, que no dudaron en comentar y alabar el esfuerzo y aguante de los athleticzales desplazados hasta Butarque.
Hubo algunos valientes que, incluso, se atrevieron a estar en manga corta y sin chubasquero pese a la lluvia intensa que caía del cielo y que no amainó hasta el minuto 35 de la primera parte. Y es que no cabe duda de que esa vitola de ser una de las mejores aficiones del mundo no se lleva por casualidad.
De lo que no disfrutaron fue de demasiadas ocasiones y es que la primera mitad del CD Leganés - Athletic se jugó más en el centro del campo, que en las áreas rivales.