El Athletic Club ha vuelto a dejarnos pruebas de que es un club muy especial y, prácticamente, único en el mundo. Con Iñaki Williams como protagonista esta vez, el cuadro rojiblanco demuestra siempre una comunión tremendamente intensa con sus aficionados y en ElDesmarque hemos podido charlar con Unai, uno de los hincha que lo ha experimentado en esta ocasión.
El delantero ghanés dejó una curiosa estampa en las redes sociales en los últimos días al montar a tres seguidores en su coche y llevarles a su destino cuando le esperaban a las puertas de Lezama para llevarse un autógrafo suyo.
La sonrisa que expresaban en la fotografía ya desvelaba la felicidad que sentían por haber conocido muy de cerca a su ídolo y que este, además, les ofreciese subir al coche. Aun así, las palabras que nos ha dejado uno de los protagonistas, refrenda esa satisfacción.
Lo cierto es que Iñaki 'salvó' a uno de los chavales de una bronca de su abuelo, pues después de acudir a la ciudad deportiva del Athletic, tenía que volver a casa para ayudarle y estaba a punto de perder el último tren.
"Estábamos los amigos y yo un día que no teníamos clase con el capricho de ir a Lezama, porque el Athletic es el equipo al que apoyamos. Fueron pasando los jugadores; nosotros muy contentos por verles y ellos fueron muy agradables, porque pararon todos a sacarse fotos con nosotros", desvela.
Nuestro amigo tenía que ir a ayudar a su aitite (abuelo en euskera), pero nosotros queríamos ver a los Williams y el último tren salía en un par de minutos. En ese momento justo salió Iñaki y le dijimos a nuestro amigo de quedarnos a saludarle, a pedirle la foto, el autógrafo y todo. Pero se iban pasando los minutos y mi amigo estaba muy agobiado porque no llegaba al tren y su aitite se iba a enfadar", sigue contando.
"En ese momento, se nos ocurrió decirle que si nos bajaba al tren", expresa con sinceridad. La respuesta de Iñaki, desde luego que no se la esperaban. "Pensábamos que nos iba a decir que no, porque tendría otras cosas que hacer, pero cuando dijo que sí, recogimos todas las cosas que teníamos, salimos corriendo hacia su coche y nos metimos", relata.
Dentro del coche, el seguidor reconoce que Iñaki les estuvo preguntando si jugaban al fútbol o qué cosas hacían en su tiempo libre. "Mis amigos juegan al baloncesto, pero yo, que juego al fútbol, le estuve comentando un poco que alguna vez ya había jugado en Lezama, cuando les entrenaba Cuco Ziganda y nos dijo que de eso ya hacía muchos años", explica.
La experiencia, desde luego, no tenía desperdicio, pero era tan increíble que necesitaban recoger pruebas de ello. "Por eso, le pedimos que se sacara un selfie rápido con nosotros", reconoce Unai.
La música que el mayor de los Williams pasó a un segundo plano en ese momento. "Sería ghanesa o inglesa. No la entendía. La dejó de fondo, porque se centró en darnos conversación. Estuvo muy agradable en todo momento y nosotros no prestamos atención a la música porque estábamos temblando", ahonda.
Pasar un rato junto a su ídolo -además de Aritz Aduriz- se les hizo muy corto, aunque lo cierto es que el trayecto tampoco fue muy extenso, pero la descripción que nos da del momento ejemplifica muy bien lo que vivieron: "No era como un sueño hecho realidad, porque esto ni entraba en nuestro pensamiento".
Iñaki Williams acercó a unos aficionados a casa después de un entrenamiento en Lezama.
[📸 TikTok: unai.orueta] pic.twitter.com/lOj2GtHSxL
— Athletic Xtra (@AthleticXtra) October 15, 2024
Este es un gesto más que demuestra cómo se vive el Athletic desde dentro. "Nosotros hemos querido siempre mucho al Athletic y siempre hemos visto los gestos que ha tenido con los aficionados. Siempre han sido muy agradables y familiares. Cuando ganaron la Copa, estuvieron de fiesta por Bilbao, que salieron todos con la gente a celebrarlo. Eso se agradece mucho y se les quiere, sobre todo, por eso, porque somos como una piña y otros clubes no hacen eso", sentenciaba el entrevistado.