El Athletic Club de Ernesto Valverde cayó en el partido de ida de la eliminatoria de octavos de final de la UEFA Europa League que tuvo lugar este jueves en el estadio Olímpico de la capital italiana. Una cita perdida en el tiempo de prolongación frente a la AS Roma de Claudio Ranieri con un marcador de (2-1) ante los transalpinos de Claudio Ranieri en un noche con un nefasto arbitraje, la lesión de Vivian y la expulsión de Yeray.
Este es el análisis de nuestro habitual sanedrín de Los Desmarcados de la derrota en Italia que habrá que remontar en San Mamés.
Derrota en el descuento de manera cruel con un gol de VAR en el 93. Tras un partido muy disputado e igualado, donde el único desequilibrio fue el criterio arbitral para las tarjetas, donde no se aplicó el mismo criterio. Con una alineación dispuesta por Valverde para la batalla, con Unai Gómez y Maroan arriba, y con Julen en la portería, el encuentro comenzó con los dos equipos tanteándose.
Los centrales romanos, con la aquiescencia del trencilla, machacaron a Maroan, sin tarjetas, mientras que cualquier contacto de los hoy púrpuras era sancionado con tarjetas, hasta 3. Pero estuvo muy ajustado, con mucho balón dividido y sin claridad para llegar a las áreas. Tan solo un larguero de Dybala y un par ocasiones nuestras fue un escaso bagaje, pero reflejo de lo sucedido.
Tras la reanudación, se adelantó el Athletic con gol a balón parado de Iñaki Williams, que pescó en el segundo palo una peinada de Paredes, sustituto del lesionado Vivian. Pero la Roma consiguió empatar rápido y se volvió a ese equilibrio. Cuando enfilábamos la recta final, con todos los cambios efectuados, Yeray vio la segunda tarjeta en el 81, y los locales olieron la sangre. Y el pistolero de gatillo fácil con los forasteros había cumplido su función.
Esos minutos finales de acoso y derribo fueron la puntilla para un Athletic cansado, que no supo defender bien el empate y de forma cruel, recibió un gol en el último segundo de la prolongación. No estuvieron nada bien los leones, demasiado incautos ante unos espabilados romanos.
Y pagamos el precio. Ahora nos queda remontar en San Mamés, que debe ser una caldera, dejando otras cuestiones al margen de una vez, para empujar en darle la vuelta a la eliminatoria. Todos a una, no hay otra. Denok batera.
Pues habrá que remontar en San Mames, porque el Athletic se trae del Olímpico de Roma una merecida derrota, pero de las que duelen y mucho, por la forma en la que ha sido, en el último segundo del partido.
Si bien la expulsión de Yeray ha condicionado en gran medida el resultado, el Athletic ha pasado de tener el partido controlado durante el primer tiempo, a tirarlo todo por la borda en el segundo a pesar de adelantarse en el minuto cincuenta, gracias a una propuesta, conservadora por parte de Valverde, una defensa muy blandita, un Athletic encogido y temeroso que se echa descaradamente para atrás propiciando un acercamiento en tromba de la Roma; y si sumamos a todo ello un árbitro muy picajoso contra el Athletic, ahí tenemos el cúmulo de circunstancias que han propiciado la tormenta perfecta que se ha llevado al Athletic por delante.
Afortunadamente queda el partido de vuelta y solo queda aprender de los errores, que ha habido, y muchos, para apelar a la épica de San Mames, en la que no queda sino ir todos a una.
Mal día ha elegido el Athletic para hacer un partido como el de hoy. Jamás mandamos, nunca pudimos si bien es cierto que el gol de Iñaki en el segundo tiempo nos ponía el partido de cara. Un arbitraje casero que nos infló a tarjetas mientras ellos veían la primera suya en el 71 tras cosernos a faltas y agarrones.
Ellos apretaban y llegaban como querían. Tuvimos suerte hasta que tanto jugar con fuego este nos quemó. La expulsión de Yeray que pecaba de “panchito” espoleaba más si cabe a la Roma que nos castigaba en el descuento.
Hoy mal el bloque, mal el míster que desdibujó al equipo con los cambios y mal sabor de boca con el que nos vamos a la cama. Muchas esperanzas en esta competición que quizás algunos pensaban que iba a ser un regalo y a la primera de cambio zasca. San Mames ha de ser un hervidero y el Athletic tiene que salir a hacer lo que sabe.
La vuelta en casa ha de ser nuestra ventaja. Podemos y sabemos hacerlo, a no ser que salga algo como lo de hoy. Yo confío en este equipo. Se avecina otra noche mágica, lo se.
Derrota de la manera más cruel. El Athletic pierde injustamente en el último segundo del descuento cuando todo parecía que el empate a 1 iba a ser el resultado final. Para colmo, los rojiblancos pierden a Yeray y Vivian para la vuelta en San Mames, uno por doble amarilla hoy con un arbitraje nefasto y el otro por lesión, esperemos que no sea para largo lo del bueno de Vivian.
No tengo ninguna duda de que este equipo le va a dar la vuelta al resultado el próximo jueves en La Catedral. Hoy ha demostrado ser un equipo con mucha personalidad ante una Roma que ha planteado un partido tosco y con mucho contacto físico pero los leones no se han amilanado. Partido de mucho desgaste que habrá que recuperar para el partido del domingo ante el Mallorca, que seguramente contará con muchos cambios de cara al partido de vuelta del jueves ante La Roma.
Ahora, ese es el más importante y en el que necesitamos el esfuerzo y el aliento de tod@s, así que el que vaya el jueves a San Mames con intención de no animar y siguiendo una huelga absurda, que se quede en su casa. Ahora es cuando más necesitamos de tod@s los athleticzales. Aurrera.
Nos sobró ese último maldito minuto para conseguir un excelente tanteador en el Olímpico de Roma. Un minuto, y que enfrente tuvimos a un equipo con empaque y hechuras de torneo europeo, que sabe atacar con velocidad y peligro, y defender con uñas, dientes y zarpas cuando la situación lo requiere. Sí a ello le añadimos un caserismo exagerado en el arbitraje, la empresa de eliminar a los romanos y acceder a cuartos se nos ha complicado mucho...
En fin, San Mamés sigue siendo un temible escenario para el rival, por muchas huelgas de ánimo caído que planteen algunos en los momentos menos oportunos. Pero no va a ser empresa fácil, no; a estas alturas, ya no quedan "equipos fletes" en la Competición...
No se pudo lograr la victoria ni siquiera aguantar el buen empate en el feudo romano que parecía un infierno. Y eso que el equipo salió bien manteniendo a los de Rainieri a raya. Un tiro al larguero de Dybala fue la más clara de la primera parte aunque el Athletic también gozó de un par de ellas.
El arbitraje fue muy severo con nosotros y muy permisivo con los romanos, balance de tres amarillas para nosotros y ninguna para ellos en jugadas del mismo calibre.
La segunda parte empezó por los mismos derroteros hasta que Iñaki remachaba de cabeza una peinadita de Paredes que salió en la primera por lesión de Vivían, que esperemos que no sea nada grave.
Con este resultado la Roma se volcó al ataque y poco tardó en igualar la contienda en una jugada floja en defensa, pero claro, condicionados por las tarjetas y viendo el rasero casero del árbitro, cualquiera entraba.
Así llegó la segunda a Yeray que dejaba al equipo en cuadro a aguantar los últimos minutos, que fueron un asedio de la Roma, hasta que en el ultimísimo minuto llegó la desgracia en forma de gol. Algo que se veía venir. En fin, habrá que salir con todísimo el jueves en la catedral, y quien dice con todo dice con todo.
Siempre nos quedará San Mamés. Pero tienen que estar bien todos y tienen que aparecer los Nico Williams, Sancet,etc osea los jugadores de más calidad.Nico tiene que despertar,aquí deben aparecer los que marquen diferencia.