El Atlético de Madrid visitaba uno de los Sevilla con la necesidad de conseguir una victoria que les permitiera seguir la estela del líder de la categoría, el Barcelona. Además de cumplir su objetivo de manera espléndida, los pupilos de Simeone han roto un maleficio que les perseguía desde hace 526 días.
Corría el 16 de septiembre de 2016 cuando Fernando Torres convertía una pena máxima ante el Sporting de Gijón. Desde entonces, el Atlético no conseguía marcar un penalti en la competición doméstica, hasta este domingo en Nervión. La friolera de 58 partidos. No obstante, la última vez que los colchoneros disfrutaron de una pena máxima fue hace 316 días ante Osasuna.
30 jornadas después y por primera vez en esta edición de LaLiga Santander (era el único equipo de la competición sin penaltis a favor) Sergio Rico derribó a Diego Costa y, en esta ocasión, el colegiado no dudó. Griezmann engañaba al meta hispalense, rompiendo así un maleficio de 526 días.