El presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, dijo este jueves que cree que el lateral brasileño Filipe Luis "se va a quedar" en el club rojiblanco pese al interés del Paris Saint-Germain francés, aunque advirtió que "hay que esperar".
"Yo creo que sí (se va a quedar), pero hay que esperar a las últimas horas y cuál es el resultado", opinó el mandatario rojiblanco en una entrevista con el canal de televisión 'Cuatro'.
"Filipe Luis es un gran jugador y una gran persona, estamos intentando que no se marche pero yo siempre digo lo mismo, los jugadores juegan donde quieren jugar. Nosotros queremos que se quede, todo el mundo quiere se que quede, pero las circunstancias son las circunstancias", añadió el presidente del Atlético.
Cerezo también se refirió al título de la Supercopa de Europa ganado al Real Madrid (2-4 en la prórroga), que calificó como "un buen comienzo de temporada" y aseguró que la actual es "una de las mejores plantillas del Atlético de Madrid en toda su historia".
"Queremos mejorar la anterior temporada y si la anterior ganamos la Europa League, este año queremos ganar la Champions que la final se juega en nuestro estadio. Vamos a salir con la mentalidad de ganarla y vamos a ver donde llegamos", aseguró.
Sobre la estrella rojiblanca, el delantero francés Antoine Griezmann, afirmó que ha "demostrado que quiere jugar" en el Atlético, ya que ha tenido "cientos de ofertas" y ha elegido continuar.
También deseó "suerte" al portero belga Thibaut Courtois, que fue guardameta rojiblanco dos temporadas cedido por el Chelsea inglés y ahora defenderá la portería del Real Madrid, del que dijo que se le recuerda con "cariño" y que "no significa nada" que fiche por el eterno rival.
Respecto a la posibilidad de una huelga de los futbolistas por el acuerdo de LaLiga Santander para jugar un partido en Estados Unidos, Cerezo dijo que va a haber negociaciones, que la gente del fútbol es "seria y disciplinada" y que todo tendrá "un final feliz", aunque recordó que el Atlético no está entre los equipos que jugaría en EE.UU., ya que teóricamente sería un partido de Real Madrid o Barcelona.