El Atlético de Madrid volvió a quejarse de un penalti no pitado, esta vez ante el Barcelona. En una falta lateral, Griezmann colgó el balón al área y Arturo Vidal paró el balón, entre la cabeza y el brazo izquierdo, cerca del área pequeña de la portería de Ter Stegen. Tanto la afición como la plantilla se acercó a Gil Manzano a pedir un penalti que finalmente no se pitó. El colegiado esperó indicaciones del VAR y allí no lo debieron ver claro, porque Gil Manzano señaló saque de banda.