Distracciones, mal juego... y el Atleti sigue ahí

No pasará a la historia el partido del Atlético de Madrid ante el Espanyol por lo sucedido durante los 90 minutos. Sí por lo que vino después, con un homenaje a la altura de Gabi, el eterno capitán rojiblanco. Entre lo que estaba por venir y la rumorología que había aturdido la actualidad rojiblanca en la última semana, el equipo sufría demasiadas distracciones. Y llegaba el Espanyol, el único equipo que ganó en Liga el año pasado en el Metropolitano. Ese típico partido de final de año que se complica casi sin querer.

Lo cierto es que el equipo de Simeone tuvo 5 minutos iniciales de una intensidad rara vez vista esta temporada. Desde el mismo pitido inicial, Griezmann se lanzó al ataque y el Atlético mordía con sus líneas muy adelantadas. Pero no duró más que eso, 5 minutos, y a partir de ahí Borja Iglesias se comió a la defensa rojiblanca. El delantero perico generó un sinfín de problemas a Oblak, que tuvo que realizar demasiadas intervenciones de mérito en una primera mitad sin ideas en ataque. Sólo Griezmann hizo un par de avisos antes del paso por vestuarios.

En la segunda, el Atlético dio un paso adelante, pero lo cierto es que en 45 minutos sólo hubo una ocasión clara de gol, la que significó el 1-0. La jugada ya había acabado en gol de Correa, pero antes Granero había soltado una patada muy clara a Koke. Griezmann no falló desde los once metros y anotó el único gol del partido. No tuvo ni una ocasión más a partir de entonces el Atleti, con poca incidencia de Vitolo y dos cambios cuanto menos curiosos: Montero para reforzar la defensa como lateral zurdo y Gelson para intentar matar al ataque. El central cumplió, pero el portugués evidenció su falta de velocidad, precisamente la que se presupone su principal cualidad.

Y al final, en resumen, tres puntos. En la semana en la que Lucas Hernández se iba a ir al Bayern, pero finalmente no, en el día en que se despedía Gabi después del partido, después de ese típico partido atascado en el que Espanyol vuelve a pescar en el Metropolitano. No hubo sorpresas y ganó el Atleti, que sigue sin dejar buenas sensaciones sobre el césped. Tendrá ahora dos semanas para mentalizarse y recuperar lesionados. Y mientras tanto, sigue ahí, acechando el liderato y sin perder la cara a la competición.