Un equipo fortalecido y una lista de la compra clara para Simeone

Cayó el Atlético de Madrid, sí. Lo hizo en la tanda de penaltis, como en alguna ocasión que conviene no recordar. No atinó en ningún lanzamiento Jan Oblak, que fue el mejor jugador colchonero en el balance de los dos partidos de la Supercopa de España. Una Supercopa que apareció en el calendario prácticamente de la nada, que se jugó en Arabia pese a ser 'de España' y en la que, para ser sinceros, el equipo rojiblanco sale fortalecido.

Porque hace un mes parecía que no estaba ni para jugar un amistoso -llegó a ganar sólo un partido de siete en noviembre- y ahora vuelve a demostrar que puede competir contra cualquier equipo. Sobrevivió en la semifinal ante el FC Barcelona, remontó, ganó al equipo blaugrana y compitió de tú a tú ante un Real Madrid que, según lo pintaban, parecía ser ya el equipo más en forma de Europa.

El lista de la compra del Atlético de Madrid

Eso sí, estos dos encuentros dejan también una evidencia para el equipo de Diego Pablo Simeone. El Cholo es capaz de transmitir su gen ganador a todos los jugadores que pasen por el equipo, de un inconmensurable Felipe a un batallador Morata. Pero Simeone, más allá de eso, necesita armas. Muchas más de las que tiene.

El Atlético de Madrid empezó el partido con sólo un jugador ofensivo que diera algo de confianza en el banquillo, en este caso Vitolo. Salió también Marcos Llorente, de corte defensivo, y otros dos defensas para completar los cuatro cambios: Stefan Savic y Santiago Arias.

Cuando Simeone quitó a Joao Félix, que estaba fundido y para colmo ha realizado dos partidos de Supercopa nefastos, no había alternativas en el banquillo, más allá del canterano Rodrigo Riquelme. Por eso entró Arias, que a su vez propició que Thomas acabara el partido como segundo delantero.

Este equipo necesita dos fichajes muy claros para enero si de verdad quiere tener una plantilla medianamente completa y, sobre todo, más competitiva. Un '9' que marque goles como el comer y un lateral zurdo que compita con Renan Lodi, que se empieza a acostumbrar a acabar los partidos en el banco. Toca sacar el billetero, que para algo acabó el club el verano pasado con más ingresos que gastos.