El Atlético de Madrid ha cerrado el mercado de fichajes dando un plus a su plantilla, sobre todo en la parcela ofensiva. Llegó Griezmann, llegó Cunha y se ha recuperado de su lesión Joao Félix. Aún así, la dirección deportiva no ha sido capaz de corregir el gran déficit del equipo, focalizado principalmente en una línea defensiva en la que Diego Pablo Simeone deberá buscar algún recurso de urgencia.
Y es que mientras que en el centro del campo y la delantera hay una competencia elevadísima para jugar, en defensa pasa todo lo contrario. El sistema de tres centrales y dos carrileros deja a pocos candidatos para ocupar el teórico once de gala, más allá de posibles lesiones o sanciones.
Uno de los principales quebraderos de cabeza que podría tener Simeone es el de los centrales. Sólo tiene cuatro en un equipo en el que habitualmente juegan tres. Ya tuvo problemas ante el Elche, cuando Felipe estaba lesionado y Mario Hermoso sancionado, lo que provocó que Kondogbia jugara como central zurdo, un recurso que podríamos ver en varias ocasiones a lo largo de la temporada.
Felipe, además, suele necesitar varios partidos para encontrar un buen ritmo de juego. José María Giménez es propenso a lesionarse, pues en los últimos cursos apenas ha jugado la mitad de los partidos. Y Stefan Savic, para colmo, tiene cuatro partidos de sanción en la Champions League, por lo que la línea de centrales quedará bajo mínimos en más de una ocasión.
En los carrileros, más de lo mismo. Trippier es fijo por la derecha, pero su sustituto natural es un Vrsaljko que no estuvo nada bien cada vez que jugó el curso pasado. De hecho, Simeone ya ha usado a Marcos Llorente en esa posición esta misma temporada. En la izquierda pasa algo similar con Renan Lodi, que no termina de adaptarse a ese puesto de carrilero. Carrasco es el teórico titular y Saúl había jugado ahí en los últimos encuentros, pero el técnico ya ha perdido ese comodín.
Non problem.