El Atlético de Madrid trabaja con muchos frentes abiertos en este tramo final del mercado de fichajes. Hasta cuatro operaciones podría llevar a cabo en las próximas horas, dos en el apartado de salidas y dos más en el de llegadas en un mes de enero más agitado de lo que suele ser habitual.
El primer nombre propio es el de Felipe Monteiro. Simeone le ha dejado claro que no cuenta con él y el jugador parece resistirse a marcharse. Todo está en su mano y ahora ha aparecido un nuevo equipo interesado en sus servicios: el Bayer Leverkusen. El brasileño podría aceptar bien la oferta alemana o la propuesta del Nottingham Forest para poner punto y final a su paso por el Metropolitano.
La otra salida que se valora, quizá más sorprendente, es la de Saúl Ñíguez. El Valencia sigue muy interesado en su incorporación y, según informa el diario Marca, todo depende del jugador, que tiene un salario demasiado alto y contrato aún hasta 2026. Se estudia la vía de una cesión hasta junio de 2024 al club de Mestalla, pero las condiciones económicas parecen difíciles de ser ajustadas.
Si se marcha Felipe, el Atlético tiene claro que firmará a Çağlar Söyüncü a cambio. Ya tiene un acuerdo con el futbolista para su llegada en verano, cuando acaba contrato con el Leicester. El dinero que puedan poner Leverkusen o Nottingham por Felipe se invertiría, a su vez, en pagar un traspaso de 2 o 3 millones por Soyuncu ahora.
En cuanto a la salida de Saúl, el club entiende que su sustituto sería Pablo Barrios, renovado y con ficha ya del primer equipo. En cualquier caso, el club también estudia el fichaje de un lateral diestro, con varios nombres propios pero nada concreto a falta de pocas horas del cierre de mercado. Según Marca, se estudia la cesión de algun lateral 'low cost' que llegase cedido hasta final de curso para aportar competencia a Nahuel Molina.