Jan Oblak fue el mejor jugador del triunfo del Atlético de Madrid ante el Girona FC. Antes del gol de Álvaro Morata, el meta sostuvo a su equipo con tres intervenciones de mucho valor. La más llamativa llegó mediada la segunda mitad, cuando David López intentó sorprenderle desde el centro del campo. El disparo iba muy bien dirigido, pero Oblak replegó de maravilla y acabó sacando una gran mano para evitar el 1-0.