Se ha acostumbrado el Atlético de Madrid ha renovar a jugadores en los últimos meses sin llegar a anunciar las operaciones de forma oficial. El último caso que ha quedado en evidencia es el de Álvaro Morata, quien firmó en su momento hasta 2023 cuando llegó procedente del Chelsea. El caso es que el delantero se ha presentado este lunes en Los Ángeles de San Rafael como uno más, lo que confirma que durante este tiempo ha renovado su contrato. Y no una, sino dos veces.
El pasado verano, el diario Marca filtró que Morata había renovado su contrato hastas 2024 en su segunda cesión a la Juventus. Una ampliación clave para que el cuadro italiano no intentara comprarle en 2022 a la baja, jugando con la opción de que le quedase sólo un año más de contrato. El Atlético nunca anunció aquella renovación.
Pero es que además, Morata ha renovado hasta 2026 hace apenas un par de semanas. Y el Atlético tampoco lo ha anunciado de manera oficial. En este caso, el delantero amplió su vinculación nada menos que hasta 2026, aunque su futuro aún así permanece en el aire.
De hecho, el diario Marca asegura que "la salida de Morata es un secreto a voces" y se da por hecho que se marchará en las próximas semanas. Lo que no está claro es el destino: el Milan es el favorito, el Al Ahli de Arabia Saudí le ofrece un sueldo astronómico y la Roma también está interesada.
No es el delantero, ni mucho menos, el único jugador que ha renovado sin que se llegara a anunciar. Los casos más recientes han sido los de Witsel, Lemar y Oblak, quienes ampliaron sus respectivos contratos sin que hubiera comunicados oficiales de por medio. Además, Matheus Cunha se ha marchado definitivamente al Wolverhampton traspasado, también sin anuncio oficial más allá del de la cesión con opción de compra.
El verano pasado, el Atlético también renovó a Felipe -automáticamente, al igual que Witsel- por un año más y rescindió el contrato de Santiago Arias sin llegar a anunciar ninguna de las dos operaciones.